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Voto a favor de Cuba

Si nuestro país votara contra Cuba en la Comisión de los Derechos Humanos de las Naciones Unidas, tal como ocurrió el año pasado, cometería otra vez un grave error. Explico por qué. Si actuamos conforme a principios de historia, solidaridad y, sobre todo, de justicia, gratitud y realidad, nuestro voto debe ser de apoyo al país hermano, no de condena. Sería también buena ocasión para terminar las indignas "relaciones carnales" con Estados Unidos, que debieran avergonzarnos como país que en ocasiones habla de soberanía. Votar a favor de Cuba, que protege los derechos humanos mil veces mejor que nosotros, haría que privilegiemos la solidaridad latinoamericana, rindiendo homenaje a nuestros libertadores San Martín, Bolívar y Martí y al pueblo cubano, que sufre el bloqueo yanqui con el que se violan todos sus derechos. Finalmente pregunto: ¿qué autoridad moral tenemos para sancionar a Cuba en este terreno, el de los derechos humanos, cuando aquí condenamos a la pobreza a millones de hermanos, hay un montón de desocupados y la salud del pueblo está cada vez peor? Votar en contra del digno pueblo cubano nos desprestigiaría al ser algo injusto poniendo en evidencia una vez más nuestra obsecuencia y sumisión al gran imperio.
Roberto Torres