El presidente del Banco Central de la República Argentina, Pedro Pou (foto), quedó en el centro de las sospechas después de que un grupo de legisladores lo acusó de no haber actuado con celeridad ante denuncias que oportunamente se presentaron por maniobras bancarias que podrían estar incluidas en el delito de lavado de dinero. Las posibles irregularidades en el ingreso y movimiento de fondos en operaciones bancarias desataron una enorme polémica que dejó al desnudo opiniones divergentes. Mientras, por ejemplo, la diputada aliancista Elisa Carrió y el presidente del Banco Provincia de Buenos Aires, Ricardo Gutiérrez, apuntaron contra Pou, el ministro de Economía, José Luis Machinea y el propio presidente de la República, Fernando de la Rúa, optaron por respaldar la continuidad del titular del Central en el organismo. El fantasma de una devaluación y la intranquilidad de los inversores extranjeros aparecen entre las principales razones por las cuales el gobierno decidió brindar apoyo a Pou "si no hay pruebas en su contra", según manifestó Machinea.
| Preocupado, Pedro Pou baja las escaleras del banco. | | Ampliar Foto | | |
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