En un encuentro discreto y muy luchado, Belgrano dio la nota al superar a Talleres por 1 a 0, en el clásico cordobés, que fue uno de los principales atractivos de la segunda fecha del torneo Clausura. El único gol fue anotado a los 18 minutos del segundo tiempo por el zaguero Julio López, mediante un tiro libre.
El equipo de Barrio Jardín fue muy superior en los primeros 20 minutos, gracias al buen manejo de Hernán Franco y Darío Alaniz, aunque carecía de profundidad a la hora de inquietar el arco defendido por Marcelo Pontiroli.
Sin embargo, Belgrano se recuperó de la mano de Mauricio Verón (se lesionó y fue reemplazado por Gastón Liendo en la primera parte) y del habilidoso Marcelo Amaya, quienes, junto al incisivo y movedizo Julio Mugnaini, comenzaron a preocupar a la defensa albiazul.
En la segunda parte, Talleres siguió dominando y tuvo una clara ocasión de anotar con un disparo cruzado de Garay, que fue despejado por López en la línea.
Pero a los 18', cuando nadie lo esperaba, Belgrano se encontró con la sorpresiva ventaja, después de que el zaguero Julio López, de tiro libre, con un derechazo desde la medialuna derrotara a Cuenca con un remate al ángulo superior derecho.
Los dirigidos por Juan José López se lanzaron a la busca del empate, pero volvieron a carecer de profundidad, ya que Belgrano se replegó y desactivó todos los ataques de Talleres, que sintió mucho la falta de un delantero de peso en el área. Belgrano iba de punto y fue banca, y no sólo ganó el clásico sino que incrementó sus chances de zafar de la promoción.
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La Ciudad
