Nuevamente un local de la zona comercial de la avenida Alberdi fue asaltado. En este caso, una pinturería fue la víctima elegida por los ladrones que que en las últimas semanas vienen asolando ese barrio.
El atraco ocurrió el mediodía de ayer en la pinturería Del Siglo, ubicada en Alberdi 169, en la intersección con bulevar Avellaneda. Dos adolescentes de unos 15 años irrumpieron cuando la propietaria del comercio, Graciela Toneatto, se disponía a cerrar el local en compañía de un empleado de nombre Oscar.
"Entró un muchachito a pedirle un aerosol a Oscar. En ese momento, apareció otro chico armado con un revólver que se metió del otro lado del mostrador. Le dijo que se tirara al suelo y le pidió que le diera la plata", comentó Graciela, que presenció todos los movimientos de los asaltantes desde la parte posterior del comercio sin que los ladrones se percataran.
Pero Oscar no se inmutó: se mantuvo parado mientras les explicaba a los ladrones que ya no podía abrir la caja registradora porque estaban a punto de cerrar el comercio. "Dame la plata", gritó uno de los ladrones, que "estaban muy alterados", relató la mujer.
Entonces el empleado tomó los cien pesos que habían quedado "como cambio para la tarde" y se los entregó. "Saqué todo lo que había en la caja y se los di", dijo Oscar. Con el dinero en su poder, los maleantes escaparon por bulevar Avellaneda.
Inseguridad
Por otra parte, Graciela se sumó al reclamo por mayor seguridad que vienen formulando los comerciantes del barrio. "Uno no sabe qué puede pasar cuando a las 8 de la noche entran dos chicos al negocio", dijo.
El último atraco en la zona norte de Rosario ocurrió el martes pasado cuando tres hombres armados asaltaron la financiera Confina, situada en Alberdi 609. Los maleantes después de reducir a empleados, clientes y un custodio se llevaron 7 mil pesos en efectivo. Según contó el gerente del comercio, uno de los delincuentes se sentó en un escritorio y simuló ser un cliente, mientras el otro se dirigió hacia la caja.
En ese momento apareció un tercer asaltante y redujo al guardia mientras que el hombre que aguardaba frente a la caja entró en acción: extrajo un revólver, encañonó a la cajera y le exigió el dinero. Cinco minutos después, los asaltantes se fueron con el botín.
La sucesión de asaltos provocó que los comerciantes de la avenida Alberdi se reunieran con los jefes policiales de las comisarías 8ª y 9ª para reclamar mayores medidas de seguridad. "Se ven más agentes en las calles, pero los delincuentes siguen robando en la cara de los policías", aseguró Eduardo Fontana, dueño de una inmobiliaria de Alberdi al 1000.
La Ciudad
