Fernández se comunicó en las últimas horas de anteayer por teléfono con su familia para decirles que estaba bien y la policía rastrea ahora el sitio de donde se efectuó el llamado. Esta información dada a conocer ayer por un alto jefe policial echa por tierra la versión que sostenía que el prófugo estaría muerto, y que está basada en un dato no confirmado que circuló en los últimos días, según la cual -además- el sospechoso había sido informante de la policía. En la tarde de ayer circularon dos versiones contrapuestas que señalan que el prófugo estaría escondido en el mismo vivero, de 700 hectáreas, donde fue hallado el cuerpo de Natalia, o en un lugar del oeste del conurbano bonaerense, aunque esto fue relativizado por la fiscalía. Voceros de la fiscalía de Marcos Pagella, a cargo de la pesquisa, advirtieron que el sospechoso es buscado en varias zonas de la costa atlántica, donde se siguen realizando allanamientos y que se está rastreando el sitio de donde partió el llamado que Fernández hizo a su familia. Otro dato que circuló con fuerza en las últimas horas es que el ex novio de Natalia, y conocido del prófugo, pudo haber tenido algún tipo de participación en el asesinato. Así lo hicieron saber fuentes muy allegadas al caso. En ese marco, el fiscal Pagella dijo que "se está estudiando la posibilidad de tomarle declaración nuevamente a Maxi y a otras personas para corroborar sus dichos". De igual forma, el abogado de la familia Melmann, Andrés Barbieri, denunció que "hay gente que ya declaró que sabe más de lo que dice". El jefe de la Departamental de Mar del Plata, comisario mayor Ricardo Adrián Triches, fuertemente cuestionado por los abogados de la familia de la víctima, fue quien informó que el prófugo está vivo.
| |