| | Doble homicidio en Santa Teresa Piden que las TOE se aparten de una investigación El abogado de dos de los detenidos sostuvo que "existe prejuzgamiento" en la fuerza de elite policial
| El abogado Carlos Varela, quien defiende a dos de los detenidos por el doble crimen de Santa Teresa, solicitó ayer al juez de la causa que aparte de la investigación a las Tropas de Operaciones Especiales (TOE) por entender que "existe prejuzgamiento". El pedido fue formulado en respuesta a declaraciones públicas del jefe de esa fuerza, Víctor Sarnaglia, quien había calificado de "una chicana de la defensa" a la denuncia judicial realizada por un detenido que denunció haber sufrido apremios ilegales por parte de agentes de esa fuerza especial de la policía santafesina. En tanto, un hombre que había sido apresado como encubridor, recuperó ayer la libertad. La solicitud de Varela fue radicada ayer en el juzgado de Instrucción a cargo de Rubén Bissio, quien investiga los homicidios de Francisco Lozada y su hijo, ocurridos el sábado pasado en una gomería de Santa Teresa. El gomero y su hijo fueron brutalmente asesinados en una vivienda situada a unos 30 metros de la ruta 18 y a unos 200 al sur del cruce con la 90. Por el hecho fueron detenidas cuatro personas, dos de ellas menores de edad. Rodolfo Rescia, el dueño de la finca en la que vivía Lozada, fue apresado bajo sospecha de ser el instigador del crimen. Una de las hipótesis que manejaron entonces los investigadores sostenía que este hombre habría pagado a dos menores de la zona para que ejecutaran el crimen, con el presunto objetivo de evitar que la víctima revelara datos comprometedores sobre su rápido enriquecimiento. Rescia negó estas imputaciones y ayer permanecía detenido. También había sido apresado su capataz, Sergio Miño, acusado de encubrimiento, quien ayer recuperó la libertad. Los restantes detenidos son dos hermanastros de 15 y 17 años. Según fuentes de la causa, este último sería el autor material del hecho y habría dado muerte a su víctima porque se negó a comprarle un par de zapatillas. Según Varela, el joven desvinculó a Rescia del hecho al declarar ante el juez de Menores Juan José Carmona. En tanto, el menor de 15 años habría tenido una participación secundaria en el hecho. Los investigadores no descartaban anoche ninguna hipótesis. En tanto, el hijo de Rescia, Ariel, de 31 años, denunció el miércoles pasado que fue sometido a apremios ilegales por parte de miembros de las TOE que lo demoraron y que pretendían obtener información con "golpes y amenazas". El jefe de la fuerza de elite, Víctor Sarnaglia, restó veracidad a esa denuncia y la calificó de "una chicana de la defensa para embarrar la cancha". En mérito a esa declaración, Varela pidió ayer que se aparte a la fuerza de la investigación porque "existe un prejuzgamiento, un opinión formada por parte de las TOE".
| |
|
|
|
|
|
Diario La Capital todos los derechos reservados
|
|
|