Lucas Castromán, el volante recientemente transferido por Vélez Sarsfield a la Lazio de Roma, viajó ayer por la tarde rumbo a Italia para incorporarse a su nueva institución. Antes de embarcarse, Castromán relató en el aeropuerto de Ezeiza que "viajo con mi padre, la gente de Vélez lo hará mañana (por hoy) con (el empresario) Roberto Settembrini. Está todo en orden, voy esperando firmar". También expresó el jugador que "estoy para dar lo mejor de mi, voy a volver a los entrenamientos porque estuve cuatro o cinco días en los cuales me fue imposible entrenar, por el tema de los papeles". "Igual, tengo doce o trece días de una buena pretemporada con Vélez. Voy a la Lazio a tratar de estar entre los once que salen y si no, ir al banco, que también sería un orgullo muy grande", agregó a los medios de prensa que lo abordaron en Ezeiza. Por último, reveló Castromán que su nuevo compañero de equipo, Diego Simeone, quien lo recomendó a los dirigentes de la Lazio, le solicitó a modo de "comisión" que le llevara a Italia bizcochitos de grasa y que "se los compré con todo gusto". La Lazio le paga a Vélez 8,5 millones de dólares por el cincuenta por ciento del pase del mediocampista. En el mismo vuelo de la empresa Alitalia que partió a las 13.10 de ayer viajó Ismael Villalba, de 17 años, corpulento goleador de Cañuelas, reciente campeón del Apertura de Primera C, que va a probarse en el Perugia. Villalba consiguió la chance por gestión de su representante, Marcelo Simonian, y a Cañuelas ya se le abonaron 150 mil dólares, asegurándosele el diez por ciento de una eventual futura nueva transferencia.
| Lucas Castroman, de Liniers a Roma, sin escalas. | | Ampliar Foto | | |
|
|