Controversia por exceso de desnudos en las pasarelas

Transparencias y cuerpos apenas envueltos en ropa, ésta es la tendencia que reina en estos momentos en las pasarelas de alta costura de Roma. "Bonita, rica, mundana", titulan los periódicos en referencia al cierre de los desfiles. Pero los comentaristas de la ciudad del Papa se preguntan: "¿Quién puede llevar eso?"
La diseñadora siciliana Marella Ferrera es, de acuerdo con los medios, una convencida seguidora de esta nueva tendencia. "Muchas mujeres quieren sus trajes iguales a los que son presentados en la pasarela", asegura la modista de Catania, que pretende ingresar en el negocio del pret-a-porter en breve.
"Un cuerpo bonito es una obra de arte y nunca es vulgar", afirma. Entre sus clientes hay muchas mujeres de entre 35 y 50 años, para quienes el culto al cuerpo es algo muy importante.
Por contra, la diseñadora Raffaella Curiel apuesta por las envolturas y la elegancia. "No, a mí no me gusta el desnudo. Una mujer debería tener secretos", dice.
También para algunas modelos esta cuestión se ha convertido en un asunto de conciencia. "Sólo salgo desnuda a la pasarela si el pase lo exige, cuando se cuenta una historia", afirma Ralitza, que desfila para Curiel. "Cuando sólo es un desnudo por el desnudo, me niego".
El nuevo diseñador estrella, el libanés Zuhair Murad, aconseja a las mujeres, de cara al próximo verano, que abandonen por completo los tops y que, en vez de ellos, muestren un cuerpo pintado.