Uno de los presos evadidos el sábado pasado de la seccional 3ª, José Antonio Sobrino Garro, es el hombre que fue detenido en Mendoza por la policía local acusado de participar en dos resonantes robos a bancos ocurridos Rosario en septiembre del año pasado: el asalto al Galicia de Alvear y Mendoza, y el del Suquía de Oroño y Salta. Los investigadores de la Agrupación Unidades Especiales habían hecho mil kilómetros hasta llegar a la capital mendocina merced a que, en uno de esos atracos, los asaltantes extraviaron un DNI falso a nombre de otra persona. Un esfuerzo que, por ahora, queda en la nada.
Sobrino Garro escapó anteayer junto a otros siete presos de la seccional de Dorrego al 100 -cuatro de ellos fueron recapturados- y hasta ayer permanecía prófugo. El evadido, un mendocino de 20 años, había sido apresado en octubre pasado en la ciudad de Mendoza por la Agrupación Unidades Especiales, acusado de intervenir en dos robos a entidades bancarias locales.
El primero de ellos ocurrió el 7 de septiembre, cuando cinco hombres asaltaron el Banco Galicia de Alvear y Mendoza. En 90 segundos se alzaron con 30 mil pesos, luego de controlar a empleados, clientes y custodios. Huyeron en un Renault 19 que habían robado a la mañana y que minutos después apareció abandonado en Güemes al 2900. Llevaban un revólver 9 milímetros y una Colt cromada.
El 20 de septiembre se produjo el siguiente golpe, cuando cinco hombres protagonizaron un violento asalto al Suquía de Oroño y Salta, donde dispararon al hijo de un ex diplomático que iba a realizar una operación. Esta vez la operación les llevó unos cuatro minutos. Se apropiaron de 40 mil pesos, luego de reducir a dos custodios. A uno de ellos lo encañonaron, le quitaron el arma y lo esposaron. Portaban una 9 milímetros y una ametralladora FMK3, con la cual, antes de irse, hirieron en la cara al inglés Michael Saluotsiels Heskeet, hijo hijo de un ex cónsul de Grecia en Rosario. Huyeron en un Peugeot 306.
Pero esta vez, cometieron un error. Extraviaron dentro del local un DNI a nombre del mendocino Eduardo Andrés Pusseto. El documento se convirtió en el hilo conductor de la investigación, primero en Rosario y luego en Mendoza, y finalmente permitió establecer una relación entre los dos hechos.
Así los policías pudieron establecer que los presuntos autores se alojaron ese día en un hotel de Laprida al 100, donde presentaron ese documento. El supuesto Pussetto se había alojado allí los días 6 y 7 de septiembre y 18 y 19 de septiembre, fechas que coinciden con las de los dos robos. En Mendoza, los agentes comprobaron que el DNI era falso y que la fotografía no correspondía al verdadero Pusseto.
Sobrino Garro fue detenido en octubre en Mendoza y sería el maleante que extravió el DNI. Antes la policía había atrapado, en Mendoza, a dos hombres que eran ajenos a los hechos. Garro estaba a disposición del Juzgado de Instrucción Nº 3 de Rosario y Nº 5 de Mendoza. Por la misma causa se encuentra detenido Enrique Alejandro Gómez, de 23 años, acusado de ser el contacto local de la banda.
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La Ciudad
