-¿Cuánto tiempo llevan formados?
-Nos formamos en 1995, pero la formación actual tiene dos años. Cuando empezamos éramos cinco, siempre con la consigna de hacer reggae, aunque éramos un poco más pop. A medida que corrió el tiempo pudimos agregar vientos y empezamos a hacer cosas con influencias de latino y fundamentalmente ska, que es lo que mantenemos hasta hoy.
-¿Quiénes forman la banda?
-Fabián Altolaguirre, en voz; Nahuel Pereyra, en guitarra; Gustavo Osan, en batería; Diego Altamore, en bajo; Sebastián de Masi, en saxo; Damián Soto, en trombón; Mario Cappelani, en trompeta; Matías Altolaguirre, en percusión y yo en teclados.
-¿Hay lugar en Rosario para el reggae?
-Tuvimos algunas actuaciones grosas, con muy buena aceptación. También tocamos varias veces en Villa Gobernador Gálvez en la fiesta de la primavera, una de ellas junto a Los Fabulosos Cadillacs y en los carnavales de Casilda, con Los Auténticos Decadentes. En Rosario estuvimos en el anfiteatro y en el teatro Lavardén, donde presentamos los temas del CD Buenos momentos que estamos preparando.
-¿Cómo llegan a este estilo?
-Nos gustaba a todos, pero era imposible hacerlo con la formación anterior. Salía como podíamos. Hoy somos nueve y tenemos caños, percusión, batería, teclados, y podemos hacer lo que nos gusta, pero como el reggae es una música muy triste le agregamos influencias pop y latinos. Había muy pocas bandas con ese estilo. Lo que estaba más ardiente y lo que hacían todas las bandas, era rock y pop, pero faltaba una banda con muchos músicos y empezamos a pelearla por ese lado.
-¿Qué reflejan en las letras?
-Tratamos de tener presente los problemas que son preferentemente rosarinos sin olvidarnos de la joda, que es lo que le gusta a la gente. Tenemos una letra sobre un tipo que vive en El Mangrullo y esa zona que se inunda, y también otro que habla de la delincuencia y otras cuestiones sociales. Escribimos muy pocas letras donde le cantamos a una mina.
-¿Por qué decidieron darle ese enfoque?
-Se dio que todos quisimos manejar ese estilo de letras. Cuando empezamos a componer eran temas de amor, pero con el tiempo se fueron haciendo más sociales. Hoy en día tratamos de mantenernos en el ska que es más animado, pero en todos los casos las letras están bien hechas y la música tiene buenos arreglos. De hecho, no todos los temas son para saltar. También tenemos algunos que son para escuchar y la gente los pide.
-¿Cuáles son sus referentes?
-Nos inclinamos un poco a lo que hicieron en su momento Los Fabulosos Cadillacs o Los Pericos, pero lo nuestro es bastante particular y no repetimos fórmulas. No tratamos de reflejar lo que ya está hecho, sino de tener una cara propia como para que no se confunda tanto con otras cosas, tanto en las letras como en la música. Hay un entendimiento natural en la banda que nos lleva a componer de cierta manera.
-¿Cuáles son los objetivos?
-Estamos terminando el disco que se llama Buenos momentos y ya teníamos grabado un demo. Este trabajo está muy bien resuelto y es un poco más profesional.
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"La gente quiere divertirse, pero no nos olvidamos de los social", dijo Badaracco. |  | Ampliar Foto |  | |
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La Ciudad
