Polémico cierre de un instituto en San Juan

El cierre de las casas de formación del Instituto del Verbo Encarnado (IVE) desató una andanada de protestas por parte de familiares, estudiantes y algunos religiosos ligados a esa incipiente congregación, que denuncian la existencia de una persecución ideológica por parte de la jerarquía de la Iglesia católica. El arzobispo de San Juan de Cuyo, monseñor Alfonso Delgado, aclaró que sólo se cerraron tres casas de formación y que la medida por él dispuesta no implica como pudo haberse mal interpretado la clausura del IVE, la organización religiosa que funciona en la localidad mendocina de San Rafael.
Apenas conocida la noticia, comenzaron a señalarse posturas contrarias a la medida dispuesta por el comisario pontificio de ese instituto, monseñor Delgado, con el objetivo de superar malentendidos y resolver las dificultades generadas por la ortodoxia doctrinaria de sus miembros.
El padre de un joven que cursó sus estudios en el seminario menor, Horacio Calderón, le expresó al presidente del Episcopado, monseñor Estanislao Karlic (Paraná), su sincera consternación por las sanciones concretadas contra el Instituto del Verbo Encarnado y advirtió que la medida es casi irreversible, dado que cualquier eventual recurso contra dichos decretos no tiene efecto suspensivo ipso iure.
En una carta al titular del cuerpo colegiado, Calderón acusa al obispo de San Rafael, monseñor Guillermo Garlatti, de ser el ideólogo de las persecuciones sufridas.