Cañada de Gómez. - El saldo de los fondos remitidos por el gobierno nacional a los damnificados por la inundación del pasado 22 de noviembre, de aproximadamente 900.000 pesos, será entregado el próximo jueves. A esa cifra se podría sumar otros 500.000 pesos si el comité de crisis recibe antes de esa fecha el saldo que resta para completar el monto de 3 millones de pesos anunciado por la provincia y la Nación.
El anuncio fue hecho por el intendente Amílcar Abate frente a un centenar de vecinos que el jueves se volvieron a movilizar al municipio para hacer notar la demora con relación a la segunda entrega de los fondos remitidos a Cañada de Gómez para paliar el déficit generado por la tragedia que dejó un saldo de tres muertos e innumerables daños materiales.
Un centenar de damnificados por el meteoro se concentró frente a la Municipalidad para solicitar una respuesta concreta con relación a la entrega del dinero restante para los inundados. También pidieron ayuda para los familiares de los fallecidos en la catástrofe, la publicación de los padrones con los pagos efectuados y una pronta respuesta a los casos aún no efectivizados.
También solicitaron la publicación del inventario con las donaciones recibidas e información sobre la concreción de las obras complementarias del arroyo Cañada de Gómez, como puentes, pasarelas y otras realizaciones que se llevó la inundación.
El pedido de los vecinos tuvo una rápida respuesta de Abate, quien salió de la Intendencia para anunciar que el jueves harán la segunda entrega del dinero que hasta el momento recibió el comité de crisis, una cifra que se eleva a los 2,5 millones, de los cuales alrededor de 1,6 ya fueron entregados a los inundados.
Queremos el dinero que falta para poder arreglar nuestras casas. Ese dinero es nuestro y las autoridades locales lo tienen que entregar. Nos vienen haciendo promesas y el dinero no lo recibimos, dijo el vecino Gerónimo Saire.
Versiones infundadas
A las necesidades puntuales de los vecinos se suman una serie de versiones infundadas que circulan como reguero de pólvora y que generan incertidumbre y desconfianza sobre el manejo de los fondos. Abate calificó como una infamia decir que el dinero se depositó en plazo fijo o que con él se pagó el salario de los municipales.
Estamos haciendo un esfuerzo muy importante para salir de esto y no puede ser que cualquier versión gane la calle generando falta de confianza en las personas que padecieron el aluvión, dijo Abate a La Capital.
Esas versiones están siendo alimentadas por sectores que pretenden sacar algún rédito político en un momento de tensión social. Podremos haber cometido muchos errores, pero nadie puede decir que no hemos trabajado con honestidad y transparencia, dijo el intendente cañadense.
Por otra parte alrededor de 300 personas afectadas por la inundación fueron beneficiadas con la llegada de los planes Trabajar. Las mismas estarán abocadas a tareas de limpieza en la zona afectada, reconstrucción de viviendas y a trabajos administrativos en diversas reparticiones oficiales.