Año CXXXIV
 Nº 48.985
Rosario,
martes  02 de
enero de 2001
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Miles de rosarinos marcharon rumbo a las ansiadas vacaciones
Los viajes a la costa atlántica fueron mayoría. Hubo refuerzos a Mardel y siguen agotados los pasajes a Brasil

Pablo Procopio

La fisonomía de la Estación Terminal de Omnibus Mariano Moreno ya empezó a cambiar. El primer día del año estuvo signado por un incesante movimiento de micros que partieron y arribaron a la terminal rosarina. El espíritu viajero de algunos rosarinos (los que pueden) produjo un aumento en los servicios, que también se incrementaron debido al tránsito de pasajeros típico de Año Nuevo. Desde las 22 de ayer los colectivos a la Costa Atlántica dieron la nota en un marco de distensión y ganas de vacacionar. El cálculo estimado desde la oficina de informes arrojó un flujo de cerca de 1.300 micros durante todo el día. Todo un dato si se tiene en cuenta que usualmente hay unas mil salidas.
A partir de las 18 hubo un marcado aumento del habitual ritmo en plataformas y salas. Frente a las boleterías se agruparon personas dispuestas a comprar su ticket. La mayoría regresaba a su casa luego de haber venido a Rosario para festejar la llegada del primer día del 2001. Con rostros marcados por el cansancio, volvían a sus lugares de origen para recomenzar hoy las tareas habituales.
Es que casi todos esperaron hasta el atardecer para regresar. En rigor, la mayoría de los colectivos salía a esa hora, pero además la gente quiso aguardar hasta después de la siesta para reponerse de una noche agitada. De todos modos, desde la oficina de informes destacaron que hubo algo más de gente en Navidad.
Pero en el movimiento de micros lo que más influyó fue el comienzo de la primera quincena de vacaciones. Si bien tradicionalmente hay un flujo mayor en la segunda, las salidas hacia zonas marítimas tuvieron un fuerte peso en el trajín de la Mariano Moreno.
Quienes optaron por partir a las playas brasileñas debieron zarpar a la mañana, ya que las salidas fueron pautadas durante las primeras horas del día. Destinos como Florianópolis, Camboriú o Torres son los elegidos por excelencia por el público rosarino. A la hora de ensayar un justificativo, los turistas apuntan a la diferencia cambiaria que los favorece. Solamente la empresa Flecha Bus dispuso cuatro servicios ayer.
Hay un dato significativo: Hasta el 17 de enero quedan 4 ó 5 asientos, dijo uno de los boleteros de la empresa a La Capital. Es decir que para viajar al sur de Brasil en colectivo habrá que esperar hasta mediados del mes que acaba de comenzar.
Después del mediodía las salidas tuvieron los destinos habituales de todo el año. Es decir, las frecuentes partidas a las provincias de Córdoba o Buenos Aires.

Una noche agitada
Pero la noche fue agitada. La Costa Atlántica argentina se convirtió en la vedete. Un ejemplo: los nueve micros de Empresa Argentina que tuvieron como meta sólo Mar del Plata. La compañía debió sumar tres refuerzos debido a la creciente demanda de pasajeros. En total, la firma fletó 13 ómnibus a la costa, porque, además de La Feliz, hubo viajes a Pinamar, Villa Gesell, Necochea y Miramar, entre otros destinos tradicionales. Pasadas las 22, familias y grupos de jóvenes esperaban poder escaparse a la playa. Por la tarde, más de 700 colectivos se movieron desde la estación y hubo refuerzos hacia la costa. Las latas de gaseosas sirvieron como bálsamo en una tarde y un anochecer agobiantes para quienes estaban a punto de lanzarse a la aventura de las vacaciones.
Al parecer, por ahora las salidas a las sierras están en stand by. No hubo, todavía, una afluencia masiva de pasajeros, hecho que se evidenció en las boleterías, que no salieron de su estándar de venta habitual.



La terminal se vió desbordada de pasajeros.
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