Quejas en Brasil por censura a una telenovela

La cadena de televisión Globo denunció al gobierno por obligarla a transmitir por la noche la telenovela Lazos de Familia, un crudo drama que toca temas como la prostitución e incluso el incesto. Además, un tribunal de Río de Janeiro prohibió que trabajaran niños en la tira argumentando que las escenas violentas estaban corrompiendo a los menores de 18 años del elenco. La cadena calificó la decisión de censura y está encabezando una intensa campaña para que el gobierno anule las nuevas regulaciones.
Cuando alguien obliga a que un programa se transmita a cierta hora, eso es censura, dijo Luiz Erlanger, presidente de Central Globo Communication. Es un problema para toda la sociedad. Comienza con una telenovela, pero quién sabe dónde podría terminar.
El mes pasado, Globo envió a la estrella de Lazos de familia y modelo ocasional de la versión brasileña de la revista Playboy, Vera Fischer, para que le planteara el problema al presidente Fernando Cardoso en un almuerzo organizado por la cadena en Brasilia. La prensa aprovechó la ocasión para fotografiarlos a los dos en una amistosa charla. Pero en la batalla por los 130 millones de televidentes de Brasil, el debate sobre las regulaciones no es nada amistoso.
El Consejo Nacional de Obispos exhortó a Cardoso a no cambiar las regulaciones sobre la televisión, destacando que el mandatario no debe venderse por un plato de comida, en una oscura referencia bíblica al Antiguo Testamento.
La secretaria de Justicia, Elizabeth Sussekind, dijo que el asunto es una cuestión puramente económica afirmando que Globo estaba quejándose de censura para defender su horario de Lazos de familia y los altos precios de la publicidad.