cartas

Gracias por llegar a tiempo

¡Gracias a la ambulancia Ciba por la rapidez con que acudió aquella noche ante mi llamado desesperado! Solamente en ocho minutos llegó a mi casa para luego trasladarme al Sanatorio Parque, con pérdida de conocimiento. Gracias de todo corazón, también a los médicos y enfermeras de la Unidad de Terapia Intensiva 2, que con su amor y dedicación me permitieron superar tan difícil momento y así poder ver nuevamente a mis seres queridos. Para todos ellos, ¡muy felices fiestas! Y que Dios ilumine siempre la noble misión que ejercen.
Hugo Grillo