Año CXXXIV
 Nº 48.980
Rosario,
miércoles  27 de
diciembre de 2000
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La mayoría se dedicó a reponer los bienes perdidos durante la tragedia
Los inundados de Cañada de Gómez invirtieron en las compras navideñas
Los comerciantes dijeron que hicieron buenas ventas, pero expresaron que no están con el ánimo para festejarlo

Walter Gasparetti

Cañada de Gómez. - "Papá Noel distribuyó más regalos en Cañada de Gómez que en el resto del país". A esta conclusión arribaron los dirigentes del Centro Económico y los comerciantes de esta ciudad luego de efectuar un análisis del incremento de las ventas con motivo de las tradicionales fiestas navideñas. El fenómeno fue atribuido a diversos factores, entre ellos el flujo de dinero que entregaron la Nación y la provincia para paliar las cuantiosas pérdidas provocadas por la inundación del 22 de noviembre pasado.
Un sondeo realizado por La Capital en comercios del centro cañadense determinó que el alza de las ventas navideñas osciló entre un 10 y un 30 por ciento. Los rubros más beneficiados fueron los artículos para el hogar, juguetes, bazar, bicicletas y ciclomotores.
Entre los motivos que figuran en el análisis tiene principal relevancia el casi millón y medio de pesos que distribuyó el comité de crisis a familias, comerciantes e industriales afectados por la inundación. Ese dinero se habría volcado mayoritariamente a la compra de heladeras, cocinas, muebles, entre otros productos.
La tendencia fue observada con cierta lógica por quienes se dedican a la venta de electrodomésticos que tuvieron que prepararse para la ocasión. En todos los casos destacaron el notable incremento en productos de primera necesidad y la masividad con que los pobladores apostaron a la producción local.
Evidentemente esta inyección de dinero proveniente de los Estados provincial y nacional cambió el ánimo en el comercio, que ha trabajo hasta en horarios inusitados, como el pasado domingo, víspera de Navidad, dijo el presidente del Centro Económico, Carlos Garma.
En efecto, el dinero distribuido a las familias damnificadas por la tragedia hizo que la realidad comercial cañadense navegara en sentido contrario al resto del país, donde las ventas navideñas cayeron alrededor de un 20 por ciento respecto del año anterior.
De acuerdo a los datos proporcionados por la Coordinadora de Actividades Comerciales (Came) la tendencia de los consumidores estuvo dada por la adquisición mayoritaria de productos que oscilaban entre dos y doce pesos. El fenómeno también fue observado en Rosario donde en algunos rubros hubo caídas del 35 por ciento con relación a otros años.
Algunos comerciantes cañadenses consultados opinaron que si bien el dinero distribuido a los damnificados originó un incremento en las ventas, ese movimiento tuvo un efecto de contagio para el resto de los pobladores de esta ciudad, quienes también se sumaron a gastar un poco más de lo habitual.

Compradores foráneos
Dentro de los análisis realizados por el sector no escapó el caudal de compradores que arribaron a esta ciudad desde localidades vecinas atraídos por los precios convenientes y por la variedad que ofrece el centro comercial de Cañada de Gómez, uno de los más importantes del sur de la provincia de Santa Fe.
En este punto, la cámara que nuclea a los comerciantes locales hizo importantes esfuerzos durante el corriente año para convertir al sector céntrico de la ciudad en el gran centro de compras de la región. Para cumplir con este objetivo bajaron los precios y aumentaron la variedad de los productos en los escaparates.
La venta fue sorprendente en artículos que no estaban en los planes, como el caso de las como bicicletas, aunque el mayor porcentaje se dio en las heladeras, cocinas y ventiladores. Fue una reactivación importante en relación con la tranquilidad que vivimos en los meses anteriores, dijo el responsable del comercio Centenario Hogar, ubicado en la esquina de Lavalle y Moreno.
Por su parte, el titular de Surtigrán, Juan Carlos Monti, un tradicional comercio que ofrece artículos de perfumería, librería, juguetería, prendas masculinas y femeninas, entre otros rubros, también coincidió con lo aportado por otros comerciantes. Al hacer un análisis particular señaló que su comercio tuvo un aumento en comparación con diciembre del año pasado.
Hemos tenido una gran venta de juguetes en estos días y es superior a la de diciembre del año pasado, dijo por su parte el dueño de Kopitos, ubicado también en calle Lavalle. El comerciante lo atribuyó a la caída generalizado de los precios de los juguetes y a la ayuda económica que recibieron los inundados.
En términos generales Cañada de Gómez fue la excepción del país a raíz del dinero que llegó para paliar la catástrofe. Un efecto que es bienvenido, pero que no festejamos en absoluto, porque detrás de eso hay gente lastimada que aún no se puede recuperar, dijo por su parte Garma.



La mayoría de los damnificados se volcó a reponer los electrodomésticos.
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