cartas

Una gran injusticia social

Tras una vida de trabajo activo que se prolongó durante casi 40 años, 26 de los cuales pasé como empleado del Banco Provincial de Santa Fe (posteriormente Nuevo Banco de Santa Fe) en Rosario, inicié los trámites para jubilarme en enero de 1996. Todos los papeles en orden y más de ocho años de aportes de lo establecido por la ley de jubilaciones no fueron suficientes, aparentemente, para que el cobro de mi jubilación fuera expeditivo. El expediente número 15102 0018606+6 viajó numerosas ocasiones desde la caja, en Santa Fe, a la caja de Rosario. El hecho es que mis ingresos se agotaron en julio de 1999, hace casi un año y medio, y sigo viviendo de la generosidad de mi familia y de amigos muy fieles. Por ello acudo a este medio, con la esperanza de que al tomar estado público esta situación, desde el gobierno provincial se solidaricen y pongan empeño en solucionar esta realidad previsional de un trabajador que después de dejar sus mejores años al servicio del país hoy se encuentra en un estado de profunda desesperanza y carencias materiales.
Alberto Levy