La profesora que anteayer fue apuñalada por un alumno de 14 años en la escuela de Avellaneda donde trabaja, atribuyó ayer a la crisis económica, social y de seguridad los hechos de violencia protagonizados por menores, al considerar que en general se trata de hijos de padres desbordados por sus problemas, lo que los deja solos, angustiados y sin ilusiones. En tanto, ayer un chico de 12 años resultó gravemente herido al recibir un balazo en la cabeza en un festejo de fin de curso.
La docente Miriam Klein, de 44 años, acuchillada por un estudiante en Wilde, anteayer advirtió que los docentes no estamos preparados para resolver estos problemas. Según su testimonio, el menor sacó un cuchillo y le apuntó directo al corazón, aunque pudo salvarse gracias a que alcanzó a retirarle el brazo y sólo sufrió cortes en una mano.
Klein se mostró comprensiva con el menor, quien, según dijo, pertenece a un hogar de clase media alta y cuya madre le aseguró que había sido recientemente sometido a tratamiento psicológico. La docente interpretó que en general, los padres, acosados por problemas económicos y laborales no pueden contener a los chicos, porque están desbordados, y nosotros no podemos arreglar esto en la escuela porque lo que hay que arreglar es la situación económica, el problema de seguridad.
No tienen ilusiones
Estimó que los menores están inmersos en una crisis social y económica, las mamás trabajan, dejan a sus hijos solos, y ellos quedan angustiados, no tienen ilusiones ni modelos, y nosotros no estamos en condiciones de atender sus problemas.
Klein relató que anteayer, cuando estaban en clase tomando examen, se sorprendió porque vio que el alumno había ido a clase con guantes de lana, y ella le preguntó por qué los llevaba puestos y él le respondió que tenía frío.
Estimó que el alumno tenía todo planeado, ya que fue al colegio con los guantes y con la navaja, y que en un momento dado me tiró al piso y me agarró del cuello para que no pudiera gritar, y tuve la suerte de que una compañera pasara por ahí y me vino a socorrer un profesor, que me lo sacó de encima, si no no estaba contando esto. Cuando nos quedamos solos directamente empuñó el arma y me apuntó al corazón, agregó.
La docente sostuvo que es imposible que las autoridades de las escuelas revisen a los niños para ver si tienen armas, porque la ley lo prohibe, y que sólo podría resolverse ese tema colocando un detector de metales en la entrada. Dijo que el alumno era en general solitario, no tenía amigos y que nunca había exhibido problemas de conducta.
El chico, de 14 años, fue llevado a un salón de la escuela y luego fue acompañado por su madre a la comisaría de Wilde. Una fuente de esa seccional precisó que el chico quedó detenido en esa dependencia policial, situada en Las Flores al 400, de Wilde, a disposición de la jueza de Menores Nº2 de Lomas de Zamora Nilda Susana Villamonte.
Fin de curso violento
En otro orden, un chico de 12 años resultó gravemente herido de un balazo en la cabeza en la madrugada de ayer cuando participaba del festejo de fin de curso con sus compañeros en la casa de uno de sus tíos en Ingeniero Budge, partido bonaerense de Lomas de Zamora. La víctima fue trasladada a un centro asistencial de la zona y luego derivada la hospital Gandulfo, donde se indicó que su estado de salud era de carácter reservado.
El hecho ocurrió alrededor de las 5 de ayer en una finca ubicada en la esquina de Palma y Bucarest, donde se reunieron alumnos del noveno año de la escuela Nº68 de Ingeniero Budge para festejar el fin de curso. Según la policía, durante la fiesta un grupo de ocho chicos -entre los que se encontraba la víctima- fue a la cocina y allí el chico sufrió la herida. Ayer los investigadores trataban de establecer si alguno de los menores efectuó el disparo o si se trató de una bala perdida.
La Ciudad
-s.jpg)
-s.jpg)
