Austin. - El equipo del presidente electo de EEUU, George W. Bush, atacado por el gobierno del mandatario Bill Clinton por supuestamente menospreciar a la economía, defendió ayer sus afirmaciones de que la economía del país se está desacelerando. Mientras ambas partes trababan combate en torno a la economía, Bush dimitió formalmente como gobernador de Texas y se proponía hacer énfasis en su agenda de reformas durante una mesa redonda con miembros del Congreso de ambos partidos. Sólo hay algo que me haría abandonar el cargo antes de tiempo y eso es convertirme en presidente, dijo Bush, en su mensaje de renuncia en el Capitolio estatal de Texas. El mandatario electo tiene propuesto concentrarse en la transición política para asumir la presidencia en menos de un mes.
No se esperan anuncios de nombramientos en el gabinete. Fuentes republicanas dijeron que hasta tres nuevos nombramientos podrían hacerse hoy.
La Casa Blanca reaccionó indignada a la advertencia de Bush, el miércoles, de una posible desaceleración en la economía, aunque ya hay evidencia perceptible de que está ocurriendo. La confianza de los consumidores ha bajado y los detallistas están reportando pobres ventas durante la Navidad. Algunos fabricantes de automóviles han paralizado temporalmente la actividad de algunas de sus plantas. Y en el tercer trimestre del año, el crecimiento económico fue de 2,2 por ciento, su ritmo más lento en cuatro años. Aparte de eso, el mercado accionario Nasdaq, cargado de valores tecnológicos, ha estado en caída libre.
Réditos políticos
El principal asesor económico de Clinton, Gene Sperling, acusó a Bush de minar la economía para conseguir beneficios partidistas a corto plazo y para reforzar un plan republicano de recortes tributarios. Lo que ustedes están viendo es al presidente electo Bush y su equipo en realidad menospreciando la economía, en la práctica probablemente inyectando más temor y ansiedad en la economía de lo que es justificado. Y creo que ese es un error muy grave de su parte, dijo Sperling.\Clinton considera que la economía, en su más prolongada expansión de la historia en época de paz, es el logro culminante de su presidencia, y los comentarios de Sperling parecieron señalar un esfuerzo más denodado para defender el historial del presidente saliente y evitar que se le culpe de una desaceleración. La contraofensiva ha comenzado, dijo un funcionario gubernamental.\No obstante, el presidente electo defendió sus declaraciones que trazan un panorama sombrío acerca de la economía de su país y ratificó que hay señales de advertencia en el horizonte. Yo creo que la gente va ratificar después de mi toma de funciones que yo soy realista. Y si hay señales de advertencias en el horizonte, debemos tener cuidado y debemos actuar de manera positiva para asegurarnos que nuestra economía continúe creciendo, aseguró Bush.\El vicepresidente electo Dick Cheney, en una visita a Washington para enmendar las relaciones con su derrotado rival en las elecciones, el senador demócrata Joe Lieberman, dijo que el equipo de Bush ha tratado de ser preciso y exacto en sus declaraciones y que el presidente de la Reserva Federal, Alan Greenspan, ha manifestado opiniones similares.