Caos por el paro de los ferroviarios porteños

Dictaron la conciliación obligatoria. Levantaron la protesta y reincorporarán a los trabajadores despedidos

El gobierno nacional ordenó ayer la conciliación obligatoria en el conflicto que mantienen el gremio de maquinistas La Fraternidad y las empresas concesionarias del servicio ferroviario, por lo cual el paro quedó levantado desde las 20 de anoche y fueron reincorporados los trabajadores despedidos. El paro y los piquetes que los trabajadores ferroviarios realizaron generaron un caos en el servicio de los distintos ramales que confluyen en la Capital Federal y provocaron la indignación de los pasajeros que debieron soportar largas esperas o recurrir a otros medios de transporte.
Las empresas concesionarias de las líneas ferroviarias Mitre, Sarmiento, San Martín, Roca y Belgrano diagramaron en la mañana de ayer un cronograma de emergencia para funcionar con un 50 por ciento de las frecuencias normales, pero a la tarde, piquetes de trabajadores cortaron las vías de distintos ramales y obligaron a suspender totalmente los servicios por varias horas.
Tras una reunión que mantuvieron representantes de La Fraternidad con el sector empresario en el Ministerio de Trabajo, el gobierno ordenó que el paro cesara a partir de las 20 y la situación se retrotraiga de hecho al contexto previo al inicio del conflicto.
El gremio de maquinistas había dispuesto a partir de las 9 de ayer un paro total de actividades en todo el país en el servicio de pasajeros y de carga, luego de que se conocieron los despidos y suspensiones ordenados por las empresas concesionarias a raíz del trabajo a reglamento que cumplían desde primera hora los maquinistas.
Los sectores gremial y empresario volverán a reunirse el próximo martes en el Ministerio de Trabajo, para avanzar en la búsqueda de una solución al conflicto, mientras que la conciliación obligatoria fue dictada por 15 días. En ese lapso, los trabajadores quedan inhibidos de realizar toda medida de acción directa que estuviesen implementando y tuvieran previsto implementar, y el sector empresario de ordenar despidos, suspensiones o cualquier tipo de medida que atente contra sus empleados.

Constitución estuvo paralizada once horas.