La policía frustró un atentado de ETA en una universidad del País Vasco

Bilbao. - La policía logró ayer desactivar una bomba que fue encontrada en el interior de un ascensor de la Facultad de Periodismo de la Universidad del País Vasco (UPV) en la localidad vizcaína de Lejona, próxima a Bilbao. El explosivo fue detectado en el interior de un paquete por el escolta de una profesora amenazada por la banda terrorista ETA que dio cuenta a los servicios de seguridad del centro, quienes a su vez informaron a la Ertzaintza (policía regional vasca) del hallazgo.
La policía autónoma vasca acusó a la organización separatista ETA de colocar la bomba. Según la Ertzaintza este paquete bomba contenía unos 3,5 kg de dinamita similar a la robada en 1999 en Bretaña (oeste de Francia) por ETA. El artefacto poseía un sistema de detonación teledirigido, lo que refuerza la hipótesis de un intento de atentado por parte de ETA.
La bomba, que parecía un paquete de folios, fue localizado por el guardaespaldas de una profesora de la facultad que figuraba en la lista de potenciales víctimas del desmantelado comando Vizcaya de ETA, informaron las autoridades. Varios profesores universitarios fueron amenazados durante los últimos meses por ETA o sus simpatizantes lo que motivó la partida hacia Estados Unidos del antropólogo Mikel Azurmendi y el historiador Txema Portillo, se indicó.
Según testigos el ascensor fue utilizado por numerosas personas que vieron el paquete sin sospechar de su contenido. El profesor Francisco Llera relató que tomó el ascensor y vio el paquete, pero que pensó que se trataba de una caja que alguien había dejado olvidada. Llera indicó que se trata de una caja cuadrada con sobres, que tiene la apariencia de ser material de secretaría.
El hallazgo se produjo días después de que estudiantes y profesores de esta Universidad se concentraran para protestar contra las amenazas constantes que sufren por parte de grupos afines a ETA. La banda terrorista lanzó este año una de las ofensivas más sangrientas de su historia con el asesinato de 22 personas y ha recrudecido su campaña de extorsión hacia los sectores no nacionalistas del País Vasco.
El clima de violencia que se vive en esa región del norte español afecta a todos los ámbitos sociales vascos, y algunos de sus más destacados intelectuales, como los profesores José María Portillo y Mikel Azurmendi y el cantautor Imanol, han optado por abandonarla por miedo a sufrir un atentado terrorista.
Para combatir esta situación, los dos principales partidos españoles, el gobernante Partido Popular (PP) y el opositor Partido Socialista (Psoe), firmaron la semana pasada un pacto antiterrorista contra ETA y en defensa de las libertades en el País Vasco.
Dos días después de la firma del acuerdo, ETA respondió el jueves con el asesinato en la localidad catalana de Tarrasa (nordeste) del concejal del PP Francisco Cano, en cuyo vehículo los terroristas colocaron una bomba.