El caso Pinochet se paseó por dos cortes de Santiago

Santiago. - Los acusadores del general Augusto Pinochet batallaron simultáneamente ayer en las cortes Suprema y de Apelaciones para revocar una sentencia que anuló el enjuiciamiento del veterano ex dictador por secuestro y asesinato de opositores, y para lograr que sea examinado mentalmente en un hospital público.
Tras escuchar los seis alegatos de los querellantes y uno de la defensa, que concluirán hoy, la Sala Penal de la Corte Suprema decidirá si respalda al tribunal inferior que hace una semana acogió un recurso de amparo del ex dictador y anuló su procesamiento por cuestiones formales.
Paralelamente, en el primer piso de los tribunales, una sala de la Corte de Apelaciones decidía si los exámenes mentales se realizarán en el hospital militar, como quiere la defensa, o en un hospital público y en presencia de dos médicos adjuntos, como quieren los acusadores.
La Corte de Apelaciones dejó pendiente la resolución sobre los exámenes, que podría difundir también hoy, día en que el tribunal superior seguirá escuchando alegatos por lo que no se espera su dictamen hasta un par de días más. Pinochet, de 85 años, fue despojado de su inmunidad de senador vitalicio el 8 de agosto, y desde entonces su equipo jurídico ha dilatado su procesamiento presentando una batería de recursos judiciales.
La Quinta Sala de la Corte de Apelaciones expresó que antes de procesarlo, el juez Juan Guzmán debió haber interrogado a Pinochet, cosa que el magistrado no hizo porque le otorgó validez de indagatoria al exhorto. La sala agregó que el exhorto fue enviado a Pinochet mientras aún estaba protegido por su fuero legislativo.
En respuesta al dictamen, la abogada acusadora Carmen Hertz, alegó que un senador aforado puede ser interrogado y que lo que el fuero impide es su procesamiento o detención. Nosotros impugnamos el fallo de la Corte de Apelaciones estimando que incurre en errores graves de derecho, porque la declaración indagatoria que se impugna es una declaración apropiada legalmente, dijo Hertz.
Su colega Alfonso Insunza agregó que la Corte no debió acoger el recurso de amparo de Pinochet porque no estaba detenido ni pesaba en su contra una orden de detención. El letrado añadió que Pinochet no objetó el exhorto aduciendo su fuero, sino que dijo que no podía responderlo porque estaba preso en Londres, entre octubre de 1998 y marzo de este año a petición de un juez español.