Ciara: "Sin cambios, tendremos problemas serios"

El gerente de Ciara, Alberto Rodríguez, reclamó medidas urgentes para superar la crisis del sector aceitero

Por primera vez en mucho tiempo la industria procesará menos granos que el año anterior, advirtió el gerente de la Cámara de la Industria Aceitera de la República Argentina (Ciara) para poner en claro la situación de emergencia en la cual se encuentra el principal complejo de exportación argentino. El directivo reclamó una acción más enérgica del gobierno en el combate contra las distorsiones del mercado internacional y, aunque admitió que la tarea no será fácil cuando se trate de enfrentar a grandes jugadores como EEUU, Europa y China, existen batallas más cercanas que se pueden ganar con una presión más fuerte. Citó, en ese lote, a los países latinoamericanos que han levantado barreras contra el aceite argentino.
-¿A qué apunta el trabajo que presentaron esta semana?
-La idea del trabajo fue conseguir una valoración de los problemas que tenemos en los distintos mercados y que afectan directamente a nuestras empresas. Se planteó la necesidad de hacer algo que sea objetivo, por eso el informe no lo hizo la propia Cámara sino que se lo pedimos a una reconocida consultora. Dígannos cuánto vale esta pérdida, le dijimos. El objetivo adicional es generar conciencia, enfatizar que el sector está enfrentando problemas serios y que no son de su responsabilidad. Aportamos más de 5.000 millones, tenemos la tecnología más moderna, y tenemos estos inconvenientes. El problema parte de las políticas de los gobiernos que subsidian y han levantado aún más políticas proteccionistas. Como somos el 20% de las exportaciones argentinas, creemos que cualquier problema que nos afecte, afecta al país.
-El trabajo pinta un escenario bastante oscuro. Se habla de emergencia. ¿Cuál es el futuro del complejo de no resolverse esta situación?
-Si no se logran cambios en las discusiones, tendremos problemas. Este es el primer año en mucho tiempo que la industria procesó menos que el año anterior.
-¿Qué posibilidad existe de que se resuelvan en parte estos problemas?
-Los temas no son fáciles, porque varios de los países que tenemos adelante son muy fuertes, llámese EEUU, UE o China. Tenemos bastantes limitaciones pero también tenemos otros casos en los que no se trata de grandes jugadores sino de países parecidos a nosotros. En ese lote están todos los mercados latinoamericanos con los cuales tenemos inconvenientes. Contra los grandes la pelea será desigual y las posibilidades de conseguir algo, limitadas, pero con los países que son similares a nosotros las condiciones son otras. Lo que pasa es que estamos viendo que esos países han venido adoptando políticas en defensa de sus sectores internos.
-¿Con qué tiempos están jugando?
-La verdad es que no estamos pensando en que si no pasa algo antes de.... Obviamente, si sigue pasando el tiempo las cosas se complican aún más. Y la sufre el sector y la cadena oleaginosa. Por lo tanto, todo lo que se pueda hacer para revertir esta situación, es positivo.
-En el mercado internacional los países adoptaron medidas para proteger sus mercados, mientras que aquí se continuó con un discurso de apertura total. ¿Se pide un cambio de actitud?
-Hace un año firmamos con otras Cámaras aceiteras del mundo un documento a favor del 0x0, que es la eliminación total de barreras a los granos y a los productos elaborados. Pero ese objetivo es a largo plazo y el punto es que, si los otros están adoptando actitudes que te limitan y cohartan, hay que hacer algo.
-Haz lo que yo digo y no lo que yo hago.
-Un ejemplo es Chile. Se presenta como abanderado del libre comercio, pero pusieron una salvaguardia del 70%.
-¿Cómo está actuando el gobierno nacional al respecto?
-Hay comprensión, pero me parece que no es suficiente. Le llevamos el problema y lo entienden. Hay algunas gestiones pero falta más fuerza.
-De las medidas que reclaman, ¿cuáles son posibles de concretar a nivel internacional?
-Los consultores dijeron que todas las medidas que se pusieron en el trabajo son razonables. En general, todas son posibles. Si tuviera que rescatar alguna para que ocurra mañana es la creación del concejo interministerial, que centralice la problemática del sector y del cual participemos. Porque nos pasó que vas a un Ministerio y te dicen que el problema es de otro.
-¿Quiénes deben participar de esa comisión?
-Cancillería, el Ministerio de Economía, particularmente Agricultura, Industria y Comercio Exterior, también jefatura de Gabinete, por su nueva función en materia de recaudación, la Secretaría de Hacienda, la Afip y nosotros.
-¿El biodiesel puede ser una salida para el sector?
-No está en el trabajo porque se lo ve como un problema doméstico pero nos interesa en la medida que podría permitir colocar producción y sacarla de otros destinos. De esta forma, la oferta estaría menos presionada. Desde ese punto de vista sería una alternativa muy interesante, de hecho la estamos estudiando. No entró en el trabajo porque consideramos en principio los problemas que están de la frontera para afuera. Algo similar ocurre con el IVA. Por eso todo lo que ocurre hacia adentro es motivo de otro trabajo.
-Otra salida podría ser la diversificación de la producción.
-El problema es que ese tipo de productos específicos pertenecen a mercados relativamente pequeños, que absorben poca producción. De todas formas, se están estudiando. También quisiéramos vender más aceite envasado y menos crudo, pero el primero las barreras arancelarias son aún mayores.
-¿Hay un punto en el que los consumidores de los países compradores puedan presionar a sus propios gobiernos?
-No creo. En general los lobbies de los sectores productivos de otros países son más fuertes que el eventual lobby del consumidor.

Alberto Rodríguez, de Ciara.