Marcela Isaías
Todos compartimos el atraso que existe en los sueldos de los profesores pero el dato objetivo es que el presupuesto del 2001 es igual al del 2000, señaló el rector de la Universidad Nacional del Litoral (UNL), Mario Barletta, también presidente del Consejo Interuniversitario Nacional (CIN), al referirse a los reclamos de los docentes universitarios.
Barletta presidirá el 43er plenario de rectores del CIN, que tendrá lugar en Santa Fe el lunes y martes próximos. En la ocasión se reunirán los 37 rectores de las universidades nacionales y se espera la visita del ministro de Educación de la Nación Hugo Juri. El plenario elegirá al nuevo presidente del CIN y tratará entre los temas centrales la cuestión presupuestaria y la designación de los representantes del CIN ante la Comisión Nacional de Evaluación y Acreditación Universitaria (Coneau).
Al margen de la elección de quién presidirá el CIN por el próximo período, y sobre lo cual todo indica que pasará de manos del radicalismo al sector del peronismo, el tema central será el presupuestario, sobre el que Barletta adelantó que se analizará el impacto que el presupuesto tendrá en la vida de las universidades en el 2001.
-¿Qué opina sobre el presupuesto previsto para el 2001?
-Debemos dejar en claro el deseo de que los fondos que se inviertan en educación, en particular en el sector público, tienen y deben crecer en este país. Sin embargo, entiendo la situación por la que se atraviesa, y que se dé la ratificación del mismo presupuesto para el 2001 que para el 2000 significa por parte de los diputados haber comprendido las preocupaciones que los rectores del CIN les manifestáramos oportunamente, y así se corrigiese el proyecto original en el que se preveía el recorte de un 20% a cada universidad para la creación de un fondo de redistribución.
-Los paros docentes y el tema presupuestario están ligados. ¿Qué pasará al mantenerse el mismo presupuesto?
-Los dirigentes de la Conadu expresaron en declaraciones a los medios que quieren discutir en paritarias los retrasos salariales, pero con el presupuesto congelado del 2000 al 2001 pensar en recomposiciones salariales es realmente muy difícil. Todos compartimos el atraso que existe en los sueldos de los profesores, algo que entiendo como rector y docente, pero el dato objetivo es que el presupuesto del 2001 es igual al del 2000. Sin embargo debemos empezar a pensar en algunas reestructuraciones dentro del sistema universitario que permitan optimizar la utilización de los recursos.
-¿Qué implica esa reestructuración?
-En primer orden la necesidad de articular entre los sistemas. La autonomía no tiene que ser un impedimento para que las universidades nacionales podamos avanzar en fuertes programas comunes, en los distintos estadios de la educación universitaria, tanto en el grado como en el posgrado. En el ámbito del grado insistimos (desde la UNL) en la posibilidad de avanzar con la Universidad Nacional de Rosario, la Universidad Nacional de Córdoba y la de Entre Ríos, en generar un sistema integrado de un ciclo inicial común, por familias de carreras, certificado por las cuatro universidades y que después les permita a los estudiantes ingresar a cualquiera de las cuatro universidades, en forma indistinta.
-¿Cómo se percibiría esta reestructuración en la mejora de recursos?
-Con este cambio estaríamos poniendo los recursos de los primeros años de las cuatro universidades en común, lo cual generarían una posibilidad de un mejor servicio para los jóvenes y optimización en la utilización de los recursos. Esos procesos de transformación en los ámbitos universitarios pueden llevar a generar, por ejemplo, aumento de la dedicación de los profesores; porque el salario bajo de los docentes mucho tiene que ver con que gran parte de ellos son de dedicación simple (ganan entre 70 y 130 pesos por mes). Por eso hay que impulsar rápidamente transformaciones en las estructuras universitarias, para avanzar a tener profesores con mayores dedicaciones. Por supuesto también hay que generar políticas para el aumento salarial, pero esto ahora es más difícil.
-También se evaluó buscar recursos a través del cobro de un arancel a los egresados, ¿evaluarán esta posibilidad en la reunión de la semana próxima?
-Creo que en virtud de ser un tema tomado por la opinión pública, el CIN lo incorporará para empezar a discutir. No creo que este consejo se expida definitivamente sobre la cuestión, pero sí que se discutirá, igual que otros temas producto de resoluciones de la Cámara de Diputados, como las modificaciones al artículo 39 (de la ley de educación superior) que elimina el impedimento que tienen títulos terciarios de educación superior no universitario para poder realizar posgrados.
-En una entrevista realizada por este diario, el rector de la UNR, Ricardo Suárez, manifestó su preocupación por el crecimiento de las universidades privadas, apoyadas en grupos financieros interesados en el negocio de la educación privada. ¿Comparte esa preocupación?
-Sí, la comparto totalmente. Por un lado hay que velar para que se cumpla un estricto cumplimiento de la normativa vigente, y que se recorra el camino de la garantía, de la calidad, de la pertinencia y del cumplimiento de esta norma, es decir que se den los pasos necesarios para todo lo que significa nueva oferta educativa. Pero por otro lado también hay que revisar permanentemente si este marco normativo y estructural que tenemos en el país es el más apropiado para las actuales circunstancias.
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La Ciudad
