La decisión del Brasil de aplicar un fuerte arancelamiento del 46 por ciento a sus compras de leche de producción argentina provocó malestar y rechazo de parte de las industrias exportadoras nacionales, que aseguraron no haber concretado colocaciones en ese destino a valores de dumping. Con la idea de preparar una contraofensiva ante las acusaciones del gobierno del vecino país del Mercosur, los directivos de las empresas lácteas cuestionadas se reunirán hoy y elevarán un pedido de audiencia urgente a los secretarios de Industria, Javier Tizado y Agricultura, Antonio Berhongaray para analizar la situación y solicitar una urgente intervención del gobierno en el tema. Además, solicitaron la intervención del presidente Fernando de la Rúa en el conflicto con el país vecino.
Tras la severa acusación del Departamento de Defensa Comercial brasileño (Decom), los empresarios argentinos afirmaron que en ningún momento se ocasionó perjuicio a los productores lácteos del país vecino, sino que las ventas se realizaron siguiendo el nivel de valores que impone el mercado internacional en el rubro.
Así lo indicó ayer el presidente de Milkaut, Luis Jullier, titular de una de las firmas cuestionadas junto con La Serenísima, Sancor, Molfino, Verónica y Williner, que colocan lácteos y subproductos en esa plaza por un valor superior a los 200 millones de dólares por año en conjunto.
Tras determinar la penalización a las firmas extranjeras que vendieron sus lácteos a Brasil a valores de dumping, el Decom les comunicó que en los próximos 15 días deberán presentar la correspondiente defensa de sus argumentos. En caso de no presentarse ese recurso, en dos semanas y para poder colocar lácteos en esa plaza, las industrias argentinas deberán pagar un arancel extraordinario del 46%, para cubrir la diferencia de precios en su mercado interno que, según el Decom, afectó a los productores locales.
El directivo de Milkaut en coincidencia con sus pares de Sancor y La Serenísima, explicó que las ventas de lácteos con destino a Brasil no se realizaron a precios de dumping, así como que para ello es necesario demostrar que se perjudicó a la producción brasileña, algo que, según los empresarios argentinos no ocurrió. En ese contexto, el presidente de Milkaut dijo que no hemos ocasionado ningún perjuicio a la producción láctea de Brasil.
Las firmas involucradas en la severa acusación de la Decom reclamaron, además, una urgente intervención de las autoridades nacionales, para que nos acompañe en la gestión ante el gobierno de Brasil.
Los empresarios aseguraron que de aplicarse la represalia comercial de los brasileños, se verían afectadas seriamente numerosas economías provinciales, como las de Córdoba y Santa Fe, que están directamente ligadas a la comercialización láctea.
Por otra parte, los industriales argentinos no descartaron que la decisión del gobierno brasileño esté relacionada directamente con la medida argentina de establecer precios máximos para el ingreso de pollos al país, producidos en Brasil, una actitud comercial local reclamada por los productores avícolas argentinos y resistida por los exportadores del país limítrofe.
Los tamberos en alerta
La medida también perjudicaría directamente a los tamberos argentinos ya que llega en el momento pico de producción lechera, un ciclo que comienza al inicio de la primavera y arroja los principales excedentes en este rubro. Las entidades de productores lecheros advirtieron que una medida de este tipo complicaría las finanzas de la actividad primaria, que históricamente se resienten en esta época.
Al volumen normal de producción que el sector deriva al mercado interno y a las exportaciones, se suma un adicional cercano al cuatro por ciento del total anual producido y aunque aparezca como ínfimo, no es un dato menor debido a que excede los requerimientos de la demanda local y hay que colocarlo en mercados externos, comentaron directivos de la Unión General de Tamberos (UGT) y de la Asociación de Criadores de Holando Argentino (Acha).
Recordaron, además que la medida de restricción comercial dispuesta por Brasil llega en momentos en que comenzaba a definirse la puesta en marcha del Fondo de Promoción para Lácteos, que funcionará con el aporte de tamberos y empresarios de la actividad. Sobre el tema, productores lecheros de la Pampa Húmeda, nucleados además en la Confederación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa (Carbap), no dudaron en afirmar que de concretarse la medida brasileña, se compromete severamente la continuidad del negocio en el país, no sólo para la producción sino también para la industria elaboradora de subproductos.
La Ciudad
