Año CXXXIV
 Nº 48.947
Rosario,
jueves  23 de
noviembre de 2000
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Cartas de lectores
Cables sueltos

El 26 de octubre, frente a mi domicilio ubicado en Pje. Lozzia al 6300 (Ayacucho 6300), un camión derribó una columna de alumbrado domiciliario (no público), obstruyendo el tránsito por esa calle. Los cables electrificados desparramados y sobre un vehículo estacionado causaban serio peligro a los transeúntes en ambas veredas. Los vecinos hemos tratado de llamar a la EPE infructuosamente por varias horas sin que nadie nos responda. También llamamos a Defensa Civil quienes trataron de comunicarse con EPE. Asimismo, se presentó un patrullero policial, que también intentaron avisar a la compañía de electricidad. Pedimos ayuda a LT3, quien envió un móvil de esa radio y pudo constatar el poste y los cables derribados y también desde ese móvil trataron de llamar a algún responsable de la EPE sin obtener una repuesta concreta. Seis horas más tarde los vecinos afectados al corte de luz por el accidente, decidimos llamar a un electricista profesional y pagarle, con nuestro propio dinero, sus honorarios para que retirara los cables electrificados y que no causara ningún accidente. Entre los vecinos, guiados por el electricista, hemos levantado la columna que obstruía la calle y apoyado contra una pared y conectamos provisoriamente la luz domiciliaria hasta tanto llegara el personal de EPE, que nunca llegó. A partir de entonces y hasta el día de hoy tratamos, infructuosamente, de comunicarnos con la EPE. El 3 de noviembre me presenté a la compañía de electricidad para hacer el reclamo correspondiente. Luego de entregarme una orden de trabajo y prometer la pronta solución del problema, pasaron 15 días y aún la columna continua apoyada en la pared, atada al balcón, corriendo peligro de una próxima caída.
Walter Jovine


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