Salta (enviado especial). - En la habitualmente tranquila noche salteña es algo poco frecuente que una murga acompañe una extensa fila de espectadores de casi dos cuadras que espera para ingresar al teatro un día de semana. La murga estaba formada por los actores del elenco mendocino Banda Espuma que ayer ingresó en el circuito de giras barriales por la capital salteña. La obra que estaba por ofrecerse era la representante de la provincia de Córdoba, Primero las damas, del grupo Acto.
Desde el título, la obra es una ironía: las cuatro integrantes demuelen el concepto de damas y dan por tierra con todo aquello que puede esperarse de señoritas con una educación prolija. La pieza también arremete contra todas las previsiones teóricas acerca de la puesta en escena y se encarga de parodiar sus fundamentaciones.
Las cuatro actrices cordobesas hacen del defecto una virtud. Con un discurso previsible y un trabajo en escena que podría ser motivo de cuestionamientos, desde el uso del espacio y los objetivos difusos, el grupo construye un espectáculo de varieté que hace eje en las problemáticas femeninas tradicionales, desde la lucha inútil contra la edad hasta la inevitable catástrofe que significan los fracasos de pareja.
Con todo, ellas lograron ofrecer uno de los espectáculos que el público más disfrutó, por el sólo placer de divertirse. A la salida de la sala nuevamente la murga mendocina puso un broche de fiesta que generó el baile espontáneo de la gente.
Entre las funciones previstas, se encontró el elenco de Formosa con una desdibujada versión de Telarañas, de Eduardo Pavlovsky. La pieza requiere de actores y directores con recursos e ingenio para resolver situaciones complejas de la puesta en escena, como sucede en los textos del autor. Pero esta vez no encontró interlocutores en prácticamente ninguno de los rubros, que perdieron el rumbo en la lectura del texto.
Una escenografía desproporcionada con respecto a los resultados preanunciaba lo que no se pudo ver en escena. Es extraño el resultado en función de que la obra, como todas las que se presentan en esta XVI Fiesta Nacional del Teatro, deben pasar primero las instancias competitivas provinciales y después las regionales. La precariedad de la puesta en escena instala dudas acerca de la efectividad del procedimiento que permite a los jurados que cada provincia se encuentre representada por lo mejor de la actividad.
Mensajes contundentes
San Luis tuvo una digna presencia con el elenco Gente de Teatro que ofreció La secreta obscenidad de cada día, un texto sólido que tuvo en los dos protagonistas a los intérpretes de Sigmund Freud y Carlos Marx. El juego propuesto por el autor es un constante cambio de roles entre dos extraños que discuten acerca de la verdadera identidad de cada uno de ellos y que sólo confluyen en su naturaleza violenta, que puede transformarlos en víctimas y victimarios. La puesta en escena incluyó solamente los elementos necesarios para acentuar la aridez de un espacio que no les pertenece a los personaje, en contrapunto con un discurso rico en imágenes y significado.
Hoy se presentarán los elencos de Buenos Aires, Santa Cruz y San Juan. Buenos Aires presentará Cámara lenta, otro texto de Eduardo Pavlovsky. Es la historia de un boxeador, su manager y una contundente presencia femenina, personajes en un marco de decadencia y marginación, pero que intentan sobrevivir con los lazos de la solidaridad y la amistad.
Claudio Bellomo, director del elenco, señaló que le atrajo el mensaje contundente que siempre se puede hallar en los textos de Pavlovsky desde su lugar de psiquiatra, al tiempo que subrayó su intención de comunicar un discurso claro vinculado al deterioro, pero también al amor y la amistad como una instancia de rescate personal.
El elenco tiene diez años y cuenta con una sala propia en Moreno, provincia de Buenos Aires, y dos salas no convencionales para la experimentación, sala de arte y biblioteca teatral. El grupo funciona como una organización no gubernamental. La zona, añadió Bellomo, registra un alto índice de marginalidad, y entre las actividades figuran las funciones de teatro en los barrios de ese municipio.
Hoy también subirá a escena el grupo Ideart, de Santa Cruz, que presentará Volvió una noche, de Eduardo Rovner. La elección de la obra depende de las demandas del público que exige comedias, algo que generalmente hacemos con el elenco, señaló su director Daniel Cazzappa, que dirige el elenco desde hace 15 años.
El elenco restante será el Círculo de Tiza Teatro, de San Juan, que pondrá en escena El murmullo. La obra, con dirección de Juan Carlos Carta, también autor del texto, pone de manifiesto la falta de compromiso de la sociedad provincial, haciendo referencia al caso de María Rosa Pacheco, una psicóloga que desapareció en 1998.