Liberan provisionalmente a un procesado por violar y quemar a su ex pareja

Un porteño acusado de violar a su ex pareja, golpearla y quemarla con cigarrillos fue liberado provisionalmente porque la Justicia entendió que tiene contención familiar suficiente como para continuar el proceso en libertad, pese a que un informe reveló que su padre está preso por un crimen.
La polémica decisión que dejó en libertad al procesado de 23 años y, cuya identidad no se revela por razones legales, fue tomada por la Sala III de la Cámara de San Isidro, la misma que otorgó salidas laborales a Alejandro Puccio, condenado a reclusión perpetua por integrar un clan que secuestró y mató a tres personas.
El hombre que ahora está en libertad fue acusado de los delitos de violación, daño, lesiones graves, privación ilegal de la libertad y resistencia a la autoridad en concurso real, que prevén una probable condena de hasta 15 años de prisión, explicaron fuentes judiciales.
Como medida alternativa a la prisión preventiva se dispuso que el procesado deba estar a por lo menos 500 metros de distancia de la ex novia, que deba tratarse psicológicamente, y que esté al cuidado de sus familiares, mientras la causa continúa camino al juicio oral.
El caso se inició el 31 de julio de este año cuando el acusado se presentó en la casa de su ex pareja, en el partido de Tigre para pedirle que reanudarán la relación, y como ella se negaba, la amenazó. También bajo amenazas de asesinar a toda su familia, el hombre llevó a la mujer a un hotel alojamiento, la golpeó, quemó con cigarrillos y obligó a tener relaciones sexuales en las que no utilizó preservativo.
Lo paradójico de la liberación es que en un informe de la perito psicóloga de la Asesoría Pericial de San Isidro que consta en la causa, se dice que el procesado relató haber tenido conflictos con su familia y falta de comunicación con su padre. Tras un robo, su padre actúa en su defensa y en la actualidad está detenido por homicidio simple, señala el informe, y agrega que el procesado se inició en la droga a los 11 años, que consumió cocaína, marihuana y anfetaminas hasta los 18 y que tiene varias heridas de bala relacionadas con peleas.