| | Cartas de lectores Los chicos y las calificaciones
| Cuando la ley federal de educación dispuso que el sistema educativo posibilitara la formación de personas íntegras y buenos ciudadanos, los docentes nos preguntamos si era correcto que nos pusiéramos en jueces de los niños y clasificáramos el aprendizaje con la conocida escala que va desde el NS (no satisfactorio) al E (excelente). Al principio coincidimos en que no era ético hacerlo, pero la ley obliga y lo estamos haciendo, siempre, apelando a nuestro sentido común y buscando ser lo más justos posibles. Los problemas aparecen en la falta de coincidencia y compromiso de todos los agentes formadores. Percibimos que lo que el niño recibe en el aula lo pierde al llegar a la vereda, mirando TV, ante el ejemplo de los mayores, que nos gobiernan, y lo que recibe en el propio hogar. El Estado es el primer agente que le falla al niño con sus ajustes, la inseguridad y la falta de trabajo. Una de las expectativas de logros a las que aspiramos desde el área es que los chicos adquieran habilidad para el ejercicio de procesos de elección y decisión. Si esto un día se logra ¿qué calificación pondrán los bajitos a la desquiciada y psicótica sociedad que los forma-deforma?. Adriana Paladini
| |
|
| |
|
|
Diario La Capital todos los derechos reservados |
|
|