River Plate, con la doble intención de ponerle fin a la hegemonía brasileña en la Copa Mercosur e intentar obtener su segundo título del año, recibirá hoy al Vasco da Gama, de Brasil, que contará con su temible goleador Romario, en el partido de ida por una de las semifinales de la tercera edición del torneo.
El encuentro, que se jugará a partir de las 21 en el estadio Monumental de River Plate, será arbitrado por el colombiano Henry Cervantes, secundado por sus compatriotas Felipe Russi y Dember Perdomo.
El equipo dirigido por Américo Rubén Gallego, campeón este año del torneo Clausura de primera división, anhela ganar la Copa Mercosur, que hasta el momento tuvo siempre tuvo como vencedores a equipos brasileños (Palmeiras en 1998 y Flamengo en 1999), y que este año tiene a Vasco da Gama en una semifinal y al citado Palmeiras y Atlético Mineiro en la otra.
River pretende romper la hegemonía que ejercen los brasileños y quedarse con otro título en el último segmento del año, para atenuar lo que podría significar una coronación de su clásico rival, Boca Juniors, en la Copa Intercontinental y en el Apertura, donde lo aventaja por ocho puntos (con un partido más para los xeneizes) cuando restan cuatro fechas para su conclusión.
Así lo entiende el entrenador Américo Gallego, quien dispondrá de sus mejores jugadores para enfrentar a Vasco, es decir que contará con los denominados Cuatro Fantásticos, Pablo Aimar, Javier Saviola, Ariel Ortega y Juan Pablo Angel, sobre quienes se sustenta el poderío ofensivo del equipo.
No podrá jugar Eduardo Berizzo, expulsado en cuartos de final ante el Flamengo, y su lugar será ocupado por el juvenil Ariel Garcé, en un puesto de volante central que no tiene dueño definido y donde River añora al Negro Leonardo Astrada, quien regresaría en enero próximo desde el Gremio de Porto Alegre, de Brasil.
Otra variante respecto del equipo que eliminó a Flamengo en la Mercosur tras ganarle los dos partidos (2-1 en Brasil y 4-3 en el Monumental) será el regreso de Gustavo Lombardi (jugó el domingo en la victoria 1-0 sobre Racing, por el Apertura) en lugar del paraguayo Pedro Sarabia, con la intención de tener más proyección por el lateral derecho.
La presencia de Romario, quien reaparece tras recuperarse de una lesión muscular, de Euller y Juninho Paulista en el ataque de Vasco da Gama no es poca cosa, y River deberá anular el circuito de fútbol que generan esos jugadores para después comenzar a mostrar su propio poderío, que también es respetable.
El equipo dirigido por Oswaldo de Oliveira no ha sido regular, tanto en la Copa Mercosur, en la que eliminó en definición por tiros penales a Rosario Central, como en el campeonato brasileño, ya que el domingo fue goleado (aunque presentó una formación suplente) en su propia cancha por San Pablo por 4 a 0.
Oliveira mantiene algunas incógnitas en el sector defensivo, ya que aún no decidió si incluirá a Odvan o al experimentado Mauro Galvao, y también duda entre el gran momento de Alexandre Torres o mantener a Junior Baiano.
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La Ciudad
