Gabriel González
Invitado por la Fundación Apertura, el economista Roberto Alemann estuvo el miércoles pasado en Rosario. En un diálogo con La Capital, el ex ministro de Economía se mostró conforme a medias con el plan de reformas implementado por De la Rúa para zafar de la crisis. Destacó la importancia de haber conseguido un blindaje que permitirá alejar los temores de un default, aunque no dejó de advertir que el gobierno cometerá un error si avanza en una rebaja de impuestos en lugar de poner todos los esfuerzos en reducir el déficit y que bajen las tasas de interés. Con tasas del 20 al 25% la economía no va a poder crecer, sentenció el legendario gurú. ¿Le gustó el plan de reformas? A medias. Es promisorio que nos den el blindaje, que es una posibilidad de girar, por ahora por una cifra indeterminada, pero muy elevada para el caso de que el país no tenga acceso al mercado de capitales para refinanciar vencimientos y financiar su déficit, que era el problema que teníamos hasta la semana pasada. Aunque lo mejor es no usarlo, porque da confianza. ¿El problema argentino es un problema de liquidez o de insolvencia? La insolvencia fiscal se terminó siendo un problema de liquidez, porque cuando a uno lo consideran insolvente dejan de prestarle. De todas maneras, se consiguió un blindaje muy alto. Es la primera vez en la historia que los organismos acceden a un blindaje de esta magnitud. Hasta ahora acudían como bomberos luego de comenzado el incendio, como ocurrió con las devaluaciones de México, Asia, Rusia y Brasil. Siempre después, cuando ya había llegado la devaluación, estaba la recesión, habían caído los bancos y las compañías. ¿Alcanza para resolver el problema estructural? Primero, nos deja vivir. A cambio de eso tenemos que cumplir algunas condiciones, una de ellas es que Nación y provincias se comprometan a no aumentar el gasto primario por cinco años. ¿Cómo ve la actitud de los gobernadores? Ellos discuten el crecimiento de la recaudación si el país llega a levantar, como creo que va ocurrir en algún momento. Entonces critican que ese dinero no se reparte y se lo queda la Nación. Luego, la discusión está en torno a qué hacer con el sobrante. Los gobernadores quieren una parte y la Nación quiere bajar impuestos. Yo digo: ni lo uno ni lo otro, hay que eliminar el déficit. Eso es lo más importante para que bajen las tasas de interés. Si aumentamos la recaudación y bajamos impuestos el déficit se quedará igual y eso nos hace insolventes a mediano plazo. El gobierno ya anunció que la mayor recaudación por productividad o por los recursos extra que pueda arrimar la tercerización de la recaudación de impuestos los van a usar para bajar impuestos y no para achicar el déficit. Las empresas pymes hoy se están financiando a una tasa del 20 al 25%. Con esos intereses la economía no podrá crecer. ¿Podrán crecer las pymes con esta presión impositiva? Una presión que no se paga, porque son muchísimos los que no pagan. ¿Y los que pagan? Esos tienen una carga muy grande. ¿Podrán despegar? Si no pueden crecer no será por la carga impositiva sino por la tasa de interés. La masa de créditos no subirá hasta que no baje el déficit o se esté en camino a bajarlo. Y el gobierno dijo que bajará impuestos cuando recaude más. Cualquier otra cosa sería dar una señal totalmente equivocada. Por esto Standars
Poor's no bajará la nota de los títulos a largo plazo sino a los de corto. El ministro Machinea hace algunas semanas anunció la rebaja de los impuestos a los intereses. Y la pregunta es ¿cómo se financia, cuánto cuesta? Trescientos millones. ¿Cómo se financia? Vendiendo activos, ¿y después? Como resultado, subieron tres puntos las tasas de interés. Los mercados reaccionan así, no son el Fondo Monetario. ¿Cómo pagamos la deuda con una carga creciente del gasto público? Y eso este programa no lo resuelve. Porque cree que bajando impuestos se estimula la actividad. ¿Y eso no es cierto? Sólo cuando los intereses son bajos. Los que no invierten o evitan tomar crédito lo hacen porque las tasas son altas o porque son pesimistas. Los que tienen acceso a créditos internacionales, a tasas de un dígito, invierten y los que tienen recursos propios también. Los demás, los que tienen que recurrir a tasas del 25%, esos son los que no invierten. Con este panorama, ¿cuál es el escenario que prevé para el próximo año? Bajará un poco el riesgo país y la economía crecerá un poco, porque se viene un cosechón de historia, superior al de hace dos años y los precios están un poco mejor. También están madurando inversiones hechas en los últimos años, por ejemplo en petroquímica y todas las inversiones que vinieron a mil millones de dólares por mes. De todos modos, el crecimiento será muy bajo.
| El economista Roberto Alemann dialogó con La Capital. | | Ampliar Foto | | |
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