Un juez dijo que el caso Fernanda Aguirre no se develará nunca

Paraná.- Uno de los jueces del tribunal designado para realizar el juicio por el secuestro de Fernanda Aguirre, cometido en San Benito, Entre Ríos, en julio de 2004, denunció hoy que fue jubilado “en tiempo récord” para quedar fuera del debate y opinó que el hecho “no se va a develar nunca”.

Por tal motivo, el juicio, que iba a comenzar el 30 de este mes, quedó suspendido hasta nuevo aviso, ya que con la jubilación del magistrado Felipe Mario Celli no está conformado el tribunal que debe realizarlo.

Celli, considerado un magistrado “garantista” del Poder Judicial de Entre Ríos, explicó a Télam que él inició los trámites para su jubilación y que “en tiempo record” se la concedieron.

El magistrado explicó que esa no fue su intención, ya que “por un imperativo ético” quería presidir la Cámara I del Crimen de Paraná durante el juicio y luego acogerse al beneficio jubilatorio.

No obstante, aseguró, su apartamiento se precipitó y además fue rápidamente difundido en la prensa local, lo que interpretó como un gesto de presión.

El magistrado vinculó este hecho a que su apartamiento del Poder Judicial entrerriano es un “anhelo del gobierno” provincial.

Por tal motivo, explicó Celli, decidió renunciar a su voluntad de participar del juicio a los dos acusados del secuestro de Fernanda y alejarse del cargo con fecha de cese a partir del 1 de agosto.

Para el juez, la causa por el secuestro de Fernanda está “manoseada y vapuleada”.

Además, denunció, existe una “ola de ocultamiento y misterio que va a quedar” después del juicio y vaticinó que el caso “no se va a develar nunca”.

Fernanda Aguirre, de 13 años, fue secuestrada en San Benito el 25 de julio de 2004 mientras caminaba hacia su casa, en momentos en que jugaban un partido de fútbol Argentina y Brasil.

El principal sospechoso del secuestro es Miguel Angel Lencina, un preso condenado por homicidio que ese día gozaba de una salida de prisión para visitar a su familia en San Benito.

Lencina fue apresado y pocos días después, el 6 de agosto de 2004, apareció ahorcado en la celda de la comisaría quinta de Paraná, donde permanecía alojado, en lo que la Justicia local consideró un suicidio. (Télam)