Año CXXXVII Nº 49512
La Ciudad
Política
Economía
La Región
Información Gral
El Mundo
Opinión
Policiales
Cartas de lectores
Mundo digital



suplementos
Escenario
Ovación
Educación


suplementos
ediciones anteriores
Turismo 17/06
Mujer 17/06
Economía 17/06
Señales 17/06
Educación 16/06
Estilo 16/06

contacto

servicios
Institucional


 sábado, 23 de junio de 2007  
El cantautor español presenta en vivo su último álbum hoy en El Círculo
Aute: "Una canción sirve para ver mejor y entendernos”
Luis Eduardo Aute dijo que “A día de hoy” es la obra menos monográfica que hizo

U. G. Mauro / Escenario

Luis Eduardo Aute dijo que “A día de hoy” es la obra menos monográfica que hizo

“Es el primer disco que saco con canciones inéditas en cinco años, aunque durante estos últimos tiempos se editaron dos álbumes dobles que se llamaron «Auteretratos», que contuvieron canciones de distintas épocas que volví a grabar. Estos temas vinieron cuando se les dio la gana porque eso hacen, y cuando se reunió un buen grupo hice una selección y me puse a grabarlas”, comentó en un diálogo con Escenario el cantautor español Luis Eduardo Aute, a propósito de la presentación de hoy en el teatro El Círculo, del disco “A día de hoy”, junto a los temas más recordados de su extensa trayectoria.

   —¿Cuál es el eje temático del nuevo disco?

   —Son catorce canciones nuevas que no guardan relación una con otra, O quizás el hilo conductor haya sido el azar, porque “A día de hoy” es un disco en el que me he dejado llevar y así salieron las canciones, muy azarosamente. Por otra parte, tampoco guardan continuidad en su extensión ya que hay alguna que dura un minuto y medio y otra ocho. En fin...es el disco menos monográfico de todos los que hice, a menos (risas) que entendamos que el azar puede ser leit motiv de un disco.

   —El tema de 8 minutos, “Aleluya Nº 8”, ¿sigue la línea de crónica histórica de los anteriores?

   —El primer “Aleluya” que escribí se editó en 1967, hace 40 años. Cada equis tiempo me viene por hacer una canción que relate el tiempo histórico que voy viviendo.

   —¿Mejoró el mundo que pintó en su “Aleluya Nº 1”?

   —Sustancialmente, creo que sigue igual, si no peor... Siempre sustancialmente hablando (risas). El hecho de que no se vean soluciones es ir para atrás. Mantener la incomodidad, la indignación y la disconformidad a lo largo del tiempo al sumar hace que siempre piense que esto va para atrás... Eso, en el caso de que exista efectivamente ese ir para atrás o para adelante, lo que constituye otra de las dudas que tengo.

   —¿No suena demasiado pesimista?

   —Eso también me lo han preguntado respecto de mis canciones y en realidad creo que no. Es evidente que optimista no soy, pero pesimista tampoco. Creo que mis canciones traducen cierto escepticismo. El optimista suele ser inconsciente y el pesimista se queda quieto; pero los escépticos somos gente activa que todavía buscamos algún cambio. Dudo y desconfío de casi todo, pero me guardo un espacio en el cual pienso que quizás el hombre no sea tan estúpido como para acabar consigo mismo. Todavía creo que el ser humano es rescatable.

   —¿Cree que, efectivamente, la canción tiene algún poder sobre la gente, en especial cuando habla de cuestiones sociales?

   —Me parece que sí, que en alguna situación límite, una canción sirve para ver y entendernos mejor, para sentir comúnmente las mismas emociones y reflexiones, pero no creo que logren incidir sobre la realidad ni que puedan cambiar nada.

   —¿Por qué, en declaraciones recientes, dijo que el mercado hoy habría destruido a una cantante como Edith Piaf?

   —Quizás lo señalé como ejemplo anecdótico, hablando sobre la industria discográfica, pero además creo que un mercado discográfico como el actual no le hubiera dado cabida. Esa música tendría poca plataforma donde sostenerse.

   —¿Y usted cómo se defiende de las presiones del mercado?

   — Pues... como puedo. Yo escribo las canciones que me apetece escribir, las que me divierten y necesito escribir. Luego las grabo. Si venden muchos discos, aleluya; si ocurre lo contrario, aleluya también y así construyo el “Aleluya Nº 9” (risas). Lo importante es hacer buenas canciones, que estén de acuerdo con el trabajo anterior, que mantengan una coherencia.

   — ¿No es demasiado humilde decir, como lo hizo, que no sabe por qué convoca tanta gente?

   — Tal vez, pero es la verdad. Que existan algunas personas interesadas en mis propios fantasmas puede ser porque todos tenemos cómplices, pero que sean tantos ya me resulta sospechoso (risas). No es que no me tenga fe, ocurre que me sorprende que lo que a mi me preocupa, le procupe a mucha gente, Si alguno está en mi onda, puede ser; pero ver todo un teatro lleno eso sí que me sorprende.
enviar nota por e-mail
contacto
Búsqueda avanzada Archivo


Ampliar FotoFotos
Ampliar Foto
El cantautor español admitió que sus canciones traducen cierto escepticismo.

Notas Relacionadas
Raperos, los nuevos cantautores


  La Capital Copyright 2003 | Todos los derechos reservados