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 jueves, 01 de marzo de 2007  
Embargarán al Iapos por no asistir a un niño sordo
Lo ordenó la Justicia ya que el nene no recibe tratamiento desde hace cinco meses. La obra social ya había desoído dos fallos que ordenaban cubrir distintas terapias

Laura Vilche / La Capital

La Justicia decidió embargar por 14 mil pesos (y 30 por ciento más por costas) a la caja diaria de prestaciones del Instituto Autárquico Provincial de Obras Sociales (Iapos) por no haber cubierto los tratamientos de un niño sordo de siete años. La obra social ya había hecho caso omiso a dos dictámenes judiciales, pero ahora Marcelo Costa, a cargo del tribunal Civil y Comercial de la 9ª Nominación, decidió designar al perito interventor que ejecutará la inhibición en los próximos días.

Alejo es el segundo de cuatro hermanos (ver aparte). Quedó sordo de ambos oídos a los 14 meses por una meningitis bacteriana. En febrero de 2005, cuando había cumplido ya sus 5 años y prácticamente no hablaba, se le realizó un implante coclear. Se le colocó en su oído derecho un aparato que cuesta unos 21.500 dólares y le permite la audición.


Sin cobertura
En ese momento como sus padres no contaban con obra social la intervención tuvo que realizarse en el Hospital Garrahan de Buenos Aires Pero la historia de la audición del pequeño recién comenzó con la intervención ya que el aparato requiere de pilas importadas reconexiones periódicas y terapias constantes que no le fueron cubiertas como era necesario por Iapos

"Hace cinco meses que mi hijo está sin tratamiento y venía avanzando bien", se lamentó Analía, la mamá de Alejo, en diálogo con La Capital. Como Iapos no cubrió los gastos como ordenó la Justicia, él, uno de sus padres y una terapeuta debieron dejar de viajar cada cuatro meses a Buenos Aires a reconectar el artefacto; una calibración demanda un desembolso de 300 pesos cada vez.

Pero además, como Alejo asiste a una escuela de enseñanza común como el Normal Nº 3, necesita de la ayuda constante de una maestra niveladora, que tampoco pudo seguir con él por falta de pago.


Los reclamos
El año pasado cuando el papá de Alejo Sebastián Aroza consiguió trabajo en el municipio de Rosario es empleado de la imprenta y gana 1.100 pesos por mes pidió al Iapos formalmente que cubriera el 100 por ciento de las prestaciones y elementos que necesita el niño para rehabilitarse Pero no obtuvo respuesta y se vio obligado a demandar a la obra social

"Basándonos en principios constitucionales, tratados y pactos internacionales, presentamos en mayo pasado un amparo por entender que la obra social avasallaba derechos de este niño. Por ejemplo, los padres pedían cinco sesiones de terapia y les querían autorizar una y encima los hacían ir con toda la documentación muchísimas veces: un manoseo. Luego presentamos una medida cautelar", recordó la abogada de la familia Aroza, Marisa Malvestiti.

Las demandas se tramitaron en el Juzgado Civil y Comercial Nº 12 del recientemente fallecido juez Rodolfo Bruch, quien el 21 de diciembre pasado falló en favor de los padres de Alejo.

El magistrado dispuso que Iapos debía afrontar "sin interrupciones" las siguientes prestaciones: calibrado del implante; gastos de traslado a Buenos Aires del acompañante terapéutico, el propio niño y uno de sus padres durante el calibrado; suministro de pilas adecuadas para el aparato, cinco sesiones fonoaudiológicas y una psicológica, semanales; y servicios de la maestra integradora.

"Tampoco allí obtuvimos respuesta, entonces fuimos por el embargo, la salud del niño está en juego", explicó Malvestiti.
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Alejo, en primer plano en la foto, quedó sordo por una meningitis.

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