Incomunicados. Los orientales esperan un fallo favorable de La Haya

Uruguay condiciona el diálogo al levantamiento de los bloqueos

Tabaré Vázquez ratificó su postura de no sentarse a negociar mientras persistan los cortes de ruta

El presidente uruguayo Tabaré Vázquez ratificó ante el gobierno español que su país se negará al diálogo con Argentina "mientras se mantenga el bloqueo" de rutas por parte de los asambleístas de Gualeguaychú que se oponen a la construcción de la pastera en Fray Bentos.

En sintonía, la Cancillería uruguaya, a cargo de Reinaldo Gargano, aseguró que "el levantamiento" de los piquetes "es condición insoslayable para una negociación entre las partes".

No obstante, el gobierno del país vecino se preocupó por desmentir que haya dado por finalizadas las gestiones del rey Juan Carlos de España, en su tarea de facilitador entre argentinos y uruguayos por la controversia por las papeleras.

Según un comunicado publicado en la página oficial de la Presidencia uruguaya, Vázquez se comunicó el miércoles por la tarde con el canciller español, Miguel Angel Moratinos.

Durante la comunicación telefónica, Vázquez "ratificó totalmente su confianza y gratitud" a ese país, al rey Juan Carlos I de España y al propio Moratinos, por la gestión del facilitador Juan Antonio Yáñez Barnuevo.

El presidente oriental, agregó el comunicado, subrayó al ministro de Asuntos Exteriores "la posición conocida: Uruguay no dialogará mientras se mantenga el bloqueo de los puentes que nos unen a Argentina".

El texto oficial indicó que Moratinos "expresó su plena comprensión ante los hechos" manifestados por Tabaré.

En tanto, el Ministerio de Relaciones Exteriores de Uruguay difundió un comunicado desmintiendo que el agente de Uruguay ante La Haya, Héctor Gross Espiell, haya dicho que las gestiones facilitadoras de España finalizaron.

Por su parte, el ex presidente Jorge Batlle respaldó la estrategia del gobierno de no negociar con Argentina sobre el conflicto por las plantas de celulosa mientras se mantengan los cortes de los puentes binacionales, porque -evaluó- el conflicto "se resuelve no haciendo tanta macana".

Para Batlle, el fallo de la Corte de La Haya es la última opción de Uruguay y dijo que hay que seguir por el camino del derecho y "aguantar, no echar leña al fuego".

"Desde mi punto de vista, el gobierno tiene que callarse la boca y seguir diciendo que mientras haya cortes no va a dialogar", opinó el ex mandatario oriental.

En otro orden, el obispo de Gualeguaychú, Jorge Lozano, quien elevó una oración ayer junto a su par de Salto (Uruguay), Pablo Galimberti, pidió que el gesto "no sea tirado por la borda" y contribuya a la concordia y la paz entre ambos países, afectada por el litigio por las papeleras.

A su vez, recordó que "con los obispos vecinos, hemos intentado este año poner gestos de fraternidad, encuentro, diálogo" ante el conflicto surgido entre ambos gobiernos por la construcción de dos papeleras supuestamente contaminantes.