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lunes,
11 de
septiembre de
2006 |
Viajeros del tiempo
Fósforos “Record”, los preferidos en las ciudades y la campaña
La fabricación de fósforos, he aquí una industria que a simple vista parece insignificante, pero que si se la mira con detención se advierte la importancia que en sí tiene, pues siendo el fósforo un artículo de primera necesidad, su consumo, tomado en conjunto, representa sumas considerables. Entre las diversas fábricas hoy existentes en el país merecen especial mención las que poseen los señores Urtubey, Sagalés y Cía., conocidos comerciantes de esta plaza, de Córdoba y de Buenos Aires, establecimientos montados con todos los adelantos modernos que permiten elaborar fósforos en cantidad suficiente como para abastecer a una gran parte del consumo de la República. De esta fábrica salen los ya ventajosamente conocidos fósforos marca "Record". Hoy, tanto en el litoral como en el interior de la República, en las ciudades como en la campaña, el público casi no conoce otra marca que Record, y si la conoce, la pospone por ésta por muchas y poderosas razones. Por ejemplo: 1º porque los fósforos Record no tienen mal olor y permanecen inalterables a cualquier temperatura; 2º resisten largo tiempo dentro del agua sin disolverse; 3º prenden todos y son pocos los que el viento apaga; 4º porque no hay menos peligrosos ni más inofensivos. Además, los fósforos Record son económicos por encenderse todos, mojados o no, en tiempo húmedo o seco, frío o caluroso, y porque la energía de su combustión resiste el viento. Son inofensivos porque tienen una preparación impermeable que cubre la pasta fosfórica y que impide la salida de los gases ofensivos antes de ser encajillados, así como no despiden olor alguno al ser prendidos. Son los menos peligrosos porque necesitando largo tiempo de estar en el agua para empezar a disolverse, burlan cualquier intento de envenenamiento y evitan, además, el riesgo que corren las criaturas que teniéndolos a su alcance se los ponen en la boca como si fuera una golosina o un objeto cualquiera. Esta superior calidad es reconocida por el público, lo que demuestra el hecho de que estos fósforos abastecen las necesidades de la mayoría del mercado nacional. Los señores Urtubey, Sagalés y Cía. han correspondido por su parte al favor que les dispensa el público cada día abaratando los precios del producto, y obligando así a las fábricas similares a hacer otro tanto, y hoy, si el consumidor obtiene fósforos baratos, se lo debe a dichos señores. No satisfechos con esto, los fabricantes de los fósforos Record han introducido mejoras en la presentación de su artículo, los que hoy se dan al público en elegantes estuches con grabados al cromo que darían envidia a las más ricas joyerías. Y últimamente han agregado una innovación que ha de tener éxito: en el anverso de las cajitas han colocado elegantes anuncios de las casas más afamadas de la república, lo que sirve de reclame gratuito a los que se dedican a la venta de este artículo.
Investigación y realización Guillermo Zinni ©
Fuente: La Capital
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