Año CXXXVII Nº 49186
La Ciudad
Política
Información Gral
El Mundo
Opinión
La Región
Policiales
Cartas de lectores



suplementos
Economía
Escenario
Ovación
Señales
Turismo
Mujer


suplementos
ediciones anteriores
Educación 29/07
Autos 27/07
Salud 26/07
Estilo 22/07
Página Solidaria 19/07

contacto

servicios
Institucional


 domingo, 30 de julio de 2006  
El largo camino hacia la igualdad

Clarisa Ercolano / La Capital

"La violencia conyugal es compleja, uno no sabe bien qué hacer, claro que si es una situación extrema y peligra la vida, tomo las medidas inmediatamente, pero también...hay cada mujer...", de esta manera, se expresa un juez del fuero civil al momento de sentar posición sobre los casos de violencia doméstica contra el sexo femenino. Para muestra basta un botón. Frases como la transcripta en esta nota se reproducen en el libro "Construyendo ciudadanía, por el derecho a una vida sin violencia", publicado por el Instituto de Género (Insgenar) de Rosario en el marco de las actividades que realizan con el objetivo de un mayor y mejor acceso a la Justicia por parte de las mujeres, la eliminación de todas las formas de violencia y discriminación y el derecho a la planificación social y al aborto.

El libro abarca distintas temáticas. Así, se explicita lo que en algún momento fue la sombra de la trata de blancas hoy es una realidad concreta conectada al crimen organizado que basa sus operaciones en la apropiación de personas a través del engaño, para ejercer la prostitución. "Hay mujeres que aceptan trabajar en algún lugar pero no en condiciones de esclavitud ni de prostitución. En la Argentina estos problemas se repiten desde el norte hacia Córdoba y también a la Patagonia, donde existen contingentes de trabajadores que requieren mujeres que atiendan sus necesidades sexuales", explica Viviana Della Siega, miembro de Insgenar, quien no titubea al momento de afirmar que en el país "existen redes de turismo sexual" en las que las mujeres son el principal "objeto".

Si bien la Argentina adhiere al protocolo contra la trata de personas, Della Siega advierte que falta personal capacitado que actúe en el tema: "Es necesario que el delito sea catalogado como federal, porque implica necesariamente el movimiento de mujeres de una provincia a otra", dice.

"Nadie quiere hablar de la trata de blancas" aseguran desde Insgenar y afirman que hay casos, incluso en Rosario -y en otras ciudades importantes del país- donde los prostíbulos funcionan en pleno centro y las mujeres se encuentran en condiciones de total esclavitud. "Es más fácil mirar para otro lado. Encima la gente cree que las mujeres se dedican a esto porque quieren, cuando la mayoría han sido engañadas", enfatiza la especialista.


Autonomía para decidir
Si bien el protocolo internacional Cedaw incluye en la Convención de los Derechos Humanos la eliminación de todas las formas de discriminación hacia la mujer, lo que además está incluido en la Constitución Nacional para mejorar los métodos de denuncia e investigación, la Argentina no ratificó el protocolo. "Existe una campaña desde sectores conservadores que cree que estos derechos instalan el tema del aborto, pero esto es falso", explica Della Siega.

Si bien Della Siega habla de un avance significativo en los últimos 30 años en materia de derechos que propicien la igualdad de género, no duda en señalar "la negación a la autonomía de la mujer y a la igualdad en todos los casos".

Uno de los pedidos más frecuentes de la mayoría de las organizaciones de mujeres es la que solicita autonomía para decidir sobre el propio cuerpo. La meta se hace difícil cuando en Santa Fe, la ligadura de trompas en las mujeres y la vasectomía en los varones es una práctica médica autorizada que sin embargo encuentra oposición en los sectores médicos por el temor a sufrir un juicio por mala praxis. "Esto no se hace sin el consentimiento del paciente, entonces no hay riesgos; acá lo que pesa es la concepción de que el médico debe decidir sobre el paciente y esto no debe ser así", explica Della Siega para agregar que estos son resabios de "una cultura patriarcal que atraviesa todos los ámbitos".


Abortar o no abortar
En el país se realizan entre 350.000 y 500.000 abortos por año. Son más de 400 las mujeres que mueren en ese mismo lapso, mientras otras 15.000 sufren graves secuelas. Las estadísticas indican claramente que cuando una mujer decide no ser madre, toma la decisión de abortar, donde sea y como sea. Al respecto Della Siega asegura que "falta poco para legalizar el aborto en caso de violación", pero aclara que "cuando se introduce el tema del derecho de la mujer a decidir sobre su cuerpo, todo cambia, el mandato cultural pesa y lo hace de manera negativa".

La postergada reforma del Código Penal incluiría entre sus modificaciones la posibilidad de permitir el aborto dentro de los tres primeros meses de gestación en caso de que la salud física o psíquica de la madre esté en riesgo. "Esto es un avance", dice la especialista, pero teme que, como casi siempre sucede en política, "al momento de negociar se terminen negando los derechos de las mujeres".


Hecha la ley ...
La sanción de una ley no significa necesariamente su cumplimiento. La ley de educación sexual, sancionada en Santa Fe en 1992, aún no se aplica. Lo mismo ocurre con la ley de procreación responsable, que encuentra resistencia en los hospitales públicos. "Si hay médicos objetores de conciencia en los hospitales públicos, que sean también objetores en la esfera privada", afirma Della Siega, que se pregunta si está bien que médicos que no cumplen con la ley sean empleados provinciales.

"Se derribaron barreras y se avanzó, pero faltan políticas de Estado que hagan cumplir la ley", enfatiza, antes de agregar que "trabajar en los estereotipos, no es educar para que los chicos sepan usar un preservativo, sino educar en la igualdad, enseñando que no son lo mismo nenas que nenes".

Un estudio reveló que si bien en la universidad son más mujeres que hombres las que se reciben, sufren mayores dificultades a la hora de ingresar al mercado laboral, y más aún cuando se trata de ocupar cargos estratégicos. "Además -arremete Della Siega- la TV incentiva esto de que la mujer es un cacho de carne sin cerebro que está para servir al hombre".

Párrafo aparte merecen las ONG's, con un rol indiscutible al momento de propiciar leyes y bregar por la educación y la concientización. "Son las ONG's las que posibilitaron que estos temas salgan a la luz porque además, están capacitadas y permanentemente organizan congresos, talleres y seminarios", finaliza.
enviar nota por e-mail
contacto
Búsqueda avanzada Archivo


Ampliar FotoFotos
Ampliar Foto



  La Capital Copyright 2003 | Todos los derechos reservados