Santa Isabel: el caso del médico trucho en la Justicia

Carlos Walter Barbarich / La Capital

Santa Isabel.- El miembro comunal por la minoría, Virgilio Benedetto, realizó una presentación en la fiscalía de Venado Tuerto contra el titular de la administración por la contratación de un médico trucho. Ezequiel Fernández ocupó la cartera sanitaria de esa localidad y entre otras anormalidades habría extendido más de cien certificados de buena salud e incluso recetado medicamentos.

Benedetto asumió el cargo en diciembre del año pasado, cuando el reelecto presidente comunal Juan Enrique Lombardi designó al frente del área de Salud Fernández. "Se decía médico y recetaba como tal, pero no hay constancias de que haya rendido al menos una materia de esa carrera", dijo Benedetto.

Tras detectarse que no había constancias que Fernández fuera profesional, Benedetto comunicó a Lombardi la anomalía y siguió investigando lo que en el pueblo era casi vox pópuli.

En su presentación ante la Fiscalía Primera de Venado Tuerto, Benedetto aportó pruebas que ratificaban las sospechas. "El falso médico tenía un recetario con una matrícula Nº 16.580,que también era falsa porque no corresponde a ningún médico de apellido Fernández", afirmó.

"Hay un claro incumplimiento de los deberes de funcionario público por parte de Lombardi, porque puso en peligro a la comunidad de Santa Isabel con la designación de un médico trucho. Fernández, en tanto, usurpó un título e irresponsablemente recetó medicamentos y elaboró diagnósticos", subrayó.

El denunciante dijo que "otra anomalía que merece un análisis pormenorizado son los certificados de diagnósticos expedidos por él, que entregaba mediante un talonario de recetario y troquelados con el membrete del Hospital Miguel Rueda de Santa Isabel y avalados a través del sello oficial del mismo nosocomio".

Según la denuncia, Benedetto luego de haber recogido pruebas de que Fernández no era médico le comunicó a Lombardi esa situación. "Ya lo sabía me dijo el mandatario comunal, por lo que pedí que esa declaración quedará en actas a través de la escribana Alejandra Cumino", dice el escrito que agrega que "en esa reunión había unas treinta personas que pueden atestiguar lo que vieron y escucharon de parte de Lombardi".