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 sábado, 27 de mayo de 2006  
Luego de 18 años, el jueves próximo se renovarán los cargos directivos en las aulas santafesinas
El desafío de dirigir una escuela
Tres educadoras que asumirán como directora y vices hablan de sus miedos y esperanzas. Coinciden en que la escuela debe ser una promotora de la cultura

Micaela Pereyra

"Es una apuesta, un gran desafío", resume Mónica Bertolini, una de las 1.500 docentes que el próximo 1º de junio asume uno de los cargos directivos recientemente titularizados por concurso, en la provincia de Santa Fe. Después de 18 años, la comunidad educativa asiste a un hecho realmente histórico: la asunción de docentes a cargos directivos por concursos de ascenso.

Luego de tres años del llamado y de la concreción del examen en el que se presentaron unos 6.000 docentes de EGB y nivel inicial, de marchas y contramarchas, de improvisaciones y recambios de gobiernos, finalmente los directores titulares tomarán sus cargos el próximo jueves. Para entender lo significativo, basta saber que el 90 por ciento de las escuelas de EGB de la Región VI (donde se incluye Rosario) renovarán sus puestos directivos.

En medio del debate por el destino de los docentes reemplazantes y la discusión sobre el futuro de la ley federal de educación planteada el pasado lunes por el gobierno nacional, cientos de directoras y vices aparecen en la escena desbordadas de esperanzas, nuevos proyectos, iniciativas y mucha energía dispuesta a hacer realidad la convicción que las llevó a presentarse en un concurso por un cargo directivo: mejorar la calidad educativa.

Claro que cada equipo directivo se encontrará con realidades muy distintas, que se reflejan en las escuelas provinciales y dadas por su ubicación geográfica y social. Algunas tendrán entonces que asumir en establecimientos que atraviesan situaciones muy complicadas, de marginalidad, de desigualdad, escuelas intervenidas y otras donde la tarea por sostener el comedor posterga lo pedagógico a un plano secundario.

Sin embargo, cada una inicia esta nueva tarea con las intenciones renovadas, con alegría, sabiendo que no podrán cambiar de un día para otro realidades derivadas incluso del modelo mismo de país, pero con la apuesta en alto, dispuestas a poner el hombro una vez más haciendo todo lo que se encuentre al alcance para que las escuelas funcionen lo mejor posible, para equiparar las posibilidades educativas y elevar el nivel de aprendizaje.

En la víspera de tan extraordinario acontecimiento, el suplemento Educación reunió a tres docentes que el jueves próximo asumirán cargos directivos en la Escuela Nº 6.055 Simón de Iriondo. Las tres educadoras se encuentran por primera vez a pocos días de estrenar su rol directivo por pedido de LaCapital.

"La información que tenemos es que nos debemos presentar el 1º de junio. Igual cada una visitó por su cuenta la escuela y la verdad es que nos recibieron de maravillas", explica Mónica Muñoz que tiene 44 años y hace 24 que enseña en escuelas de EGB, en especial en el área de lengua en los 7º años.

"La verdad es que me quedé encantada de cómo me recibieron, fue muy cálido, me dijeron: •Te estábamos esperando', así como una cuestión muy sentida y eso es impactante porque uno tiene pudor ya que nos encontramos en un lugar muy comprometido porque llegamos nosotras pero se van otros", relata Mónica Bertolini que será la directora de la escuela de calle Suiza 220. Tiene 40 años y es la más joven de las tres, hace 19 años que es docente y se desempeña en los distintos niveles de la educación: en la EGB, en terciario y en la universidad.

Ana María Fortuna tiene 55 años, es ingeniera química y hace 31 años que es docente. Es la única de las tres que tiene experiencia en cargos directivos ya que hizo un reemplazo de poco más de un año. "Para mí es un honor volver a mi escuela primaria, yo soy ex alumna y realmente la impresión que me causó es extraordinaria", cuenta.

Las tres destacan las condiciones de la escuela a la que llegan: "Han trabajado a pulmón durante 18 años y fueron gestionando y resolviendo, no creo que todo el mundo corra la misma suerte que nosotras, hay gente que llega a otras escuelas con muchas problemáticas, nosotros llegamos a una urbana, ubicada en un barrio, nos precede una buena gestión, la cooperadora trabaja muy bien. Tenemos allanado el camino", señala Mónica Muñoz.


Conocer y transformar
Durante la charla, es permanente la alusión a la singularidad de la situación histórica que protagonizan luego de casi dos décadas sin concursos de ascenso. "Lo esperábamos, es la única forma que tiene nuestra profesión de hacer carrera y por suerte Santa Fe tiene este sistema, porque no en todas las provincias se concursa por oposición y antecedentes", resalta Mónica Muñoz.

Las tres siguen actualizándose, realizando postítulos y maestrías tanto en gestión como en sus especialidades. "Estoy permanentemente estudiando, no por una cuestión de búsqueda del éxito o de la credencial, sino para aprender, para estar al día, para tratar de comprender lo que está pasando, para mí es fundamental entender que el conocimiento es una herramienta para comprender, transformar, cambiar o mirar con otros ojos esta realidad tan compleja", analiza Mónica Bertolini que espera llevar a la práctica todo su bagaje teórico.

"Considero que el director es también un pasador de experiencia, no solamente el que realiza la gestión cuando se rompe una canilla, a pesar de que lo tiene que hacer. Es alguien que pasa sus conocimientos, ayuda, acompaña. A lo mejor es una visión muy utópica la mía y después me encuentre en un escritorio tapada de papeles...", agrega.

El trabajo cotidiano es el eje principal que cada una de las docentes intenta profundizar. Una de las próximas vicedirectoras, Mónica Muñoz, dice que "es muy importante la construcción de los equipos de trabajo" y subraya que la tendencia actual apunta a resolver las situaciones en equipo, "el director ya no está solo, se habla del equipo directivo". Quien será la directora se suma a la propuesta: "Creo que esto que dice Mónica es vital porque por más que haya disidencias y singularidades dentro del equipo directivo, existen una serie de acuerdos, de lineamientos que fortalecen la institución, entonces un mismo discurso coherente da seguridad al docente".

Pero además espera sumar a todos los docentes al compromiso con la gestión institucional. "Creo que hay que ir por más, porque la gestión se hace con los docentes, porque sino queda instalada una visión de que uno gestiona y planifica, y los otros hacen o ejecutan".

Ana María Fortuna cree que hay que trabajar para lograr una buena comunicación: "Pienso que en el equipo el diálogo es importantísimo, escucharnos, conocer los puntos de vista de uno, de los otros, que es lo que cada uno piensa, me parece que la comunicación es fundamental".

Siguiendo con el rol de los directivos, Mónica Muñoz rescata el sistema rotativo de vicedirectores que actualmente funciona en la Escuela Simón de Iriondo. "Si el vicedirector tiene que supervisar el primer ciclo no está solamente en un turno. Algunos días trabaja de tarde y otros de mañana. Esto es fundamental para evitar la competencia entre los dos turnos, descartar conflictos y lograr un equilibrio educativo dentro de la escuela", resalta.

Saben que el primer tiempo será una época de diagnóstico, de conocerse, de presentación y que la implementación de nuevos proyectos vendrá con el tiempo. Sin embargo, la directora deja en claro algunos pilares en los que espera poder hacer hincapié: "Creo que el acento hay que ponerlo en los chicos, en recuperar la idea de que hay que seguir transmitiendo y pasando cultura, la escuela tiene que volver a tomar este lugar de institución promotora de la cultura en esta competencia que tenemos con todas las demás agencias culturales".

También en varias oportunidades resurge la idea de fomentar y trabajar con los chicos la cultura del esfuerzo y del trabajo. En este sentido, Bertolini se explaya: "Esperamos poder rescatar en los chicos la importancia de conocer y volver a pensar algunas cosas y darse cuenta de que no todo lo novedoso sirve, no todo tiene que ser divertido, de que a veces hay que volver para atrás. Hay muchas cosas que se perdieron y son bien de nuestra cultura. Esto es lo que queremos trabajar con los chicos".
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Mónica Bertolini, Mónica Muñoz y Ana María Fortuna comenzarán el jueves su carrera directiva en la Escuela Nº 6.055 Simón de Iriondo.

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