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 sábado, 06 de mayo de 2006  
Reabrió ayer el Rich y ahora lo administran sus empleados

Y las puertas volvieron a abrirse. El tradicional restaurante Rich, de San Juan y San Martín, reabrió ayer administrado por sus empleados, que conformaron una cooperativa. Con el visto bueno de la Justicia, los 35 trabajadores del local lograron torcer el destino de la quiebra que habían presentado los dueños del comercio y ahora ellos mismos buscarán seguir adelante con el emprendimiento.

A juzgar por lo que sucedió en el primer día, todo indica que las cosas marcharán con viento a favor. Desde que las puertas se abrieron en horas del mediodía, la llegada de clientes fue continua y los integrantes de la cooperativa trabajaron a destajo.

La continuidad de la explotación comercial del restaurante bajo la figura de una cooperativa fue autorizada por el juez Civil y Comercial, Eduardo Oroño, quien había considerado en su resolución que "el establecimiento cuenta con una inserción en el mercado gastronómico que es pública y notoria, y con una exigente y vasta clientela que ha acostumbrado su paladar a las especialidades de la casa. No advirtiéndose motivo para que ello deba variar cuando precisamente se debe a la labor de los mismos trabajadores, que solicitan continuar con la explotación".

Ahora, los empleados deberán cumplir con una serie de requisitos impuestos por la Sindicatura, entre ellos la obligación de no contraer nuevos pasivos, la elaboración del plan de explotación y el mantenimiento del contrato de locación vigente hasta el 30 de junio.
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Los empleados armaron una cooperativa y torcieron el destino.

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