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 sábado, 22 de abril de 2006  
La dictadura y su impacto en las universidades
Cuando la represión dejó su huella en las facultades rosarinas
Para recordar los 30 años del golpe, docentes y estudiantes del nivel superior realizan múltiples actividades

Matías Loja / La Capital

"Sólo se puede estudiar, pensar e investigar cuando un fecundo orden y silencio nos rodea (...), los aullidos, la anarquía y los gritos de las asambleas estudiantiles nunca permitieron el diálogo", fueron algunas de las palabras expresadas hacia el año 81 por Humberto Riccomi, el rector interventor de la Universidad Nacional de Rosario (UNR) durante los años de la dictadura, en una muestra cabal del espíritu de la época que se respiraba entonces por los pasillos de las facultades.

El primer rector que la dictadura puso al frente de la UNR fue el coronel Joaquín Sánchez Matorras, pero fue sucedido al poco tiempo por Riccomi, quien permaneció en el cargo hasta el año 1983, por lo que se convirtió en uno de los funcionarios del Proceso que más duró en su función.

"Otro de los problemas encarados fue la grave y angustiante falta de docentes investigadores necesarios, en cantidad y calidad para la universidad (...). Este serio problema, consecuencia de largos años en que las autoridades sólo se preocuparon por alimentar la subversión en todas sus formas, debió ser resuelto en todos sus niveles", dijo también el ex rector de los años de plomo. Expresiones como éstas fueron recopiladas por docentes de la Facultad de Ingeniería de la UNR en un trabajo que destaca el paso de las botas por la universidad.

Docentes cesanteados, persecución estudiantil y el desmantelamiento de las investigaciones era el triste escenario que los docentes de Ingeniería reseñan en el trabajo, que en forma de muestra, presentaron hace un tiempo atrás en el hall central de la facultad de calle Pellegrini, aunque los responsables de la muestra se han propuesto, en el mediano plazo, poder reseñar todo ese trabajo en una publicación.

Docentes cesanteados, persecución estudiantil y el desmantelamiento de las investigaciones era el triste escenario que los docentes de Ingeniería reseñan en el trabajo, que en forma de muestra, presentaron hace un tiempo atrás en el hall central de la facultad de calle Pellegrini, aunque los responsables de la muestra se han propuesto, en el mediano plazo, poder reseñar todo ese trabajo en una publicación.


Documentos del pasado
El proyecto se basa en documentos que, tras la restauración democrática, los estudiantes comenzaron a reclamar al rectorado acerca de los años de la dictadura en la universidad, trabajo que fue posteriormente completado con testimonios de docentes y estudiantes perseguidos por la represión del Estado en épocas del Proceso.

Según explica Nora Pellegri, docente de la Facultad de Ingeniería y una de las responsables de la iniciativa, una de las áreas de esta unidad académica que más sufrió el paso de la dictadura fue el Departamento de Física, al que pertenecían dos docentes desaparecidos, Julia Huarque y Eduardo Pasquini.

"Muchos docentes fueron cesanteados, y otros debieron exiliarse, por lo que casi el 50 por ciento de los miembros del departamento tuvieron que irse", explica Pellegri, quien agrega que muchos de ellos desarrollaron posteriormente su carrera de investigación científica en varios países de Europa, mientras que otros fueron reincorporados con el advenimiento de la democracia.

Asimismo, la docente, perteneciente a la Asociación de Docentes de la Facultad de Ingeniería de la UNR (Adfi) explica que junto con miembros de la Secretaría General del Centro de Estudiantes de Ingeniería y del Centro de Estudiantes del Politécnico, se conformó una Comisión por la Memoria, para realizar acciones conjuntas referidas al tema.

Asimismo, la docente, perteneciente a la Asociación de Docentes de la Facultad de Ingeniería de la UNR (Adfi) explica que junto con miembros de la Secretaría General del Centro de Estudiantes de Ingeniería y del Centro de Estudiantes del Politécnico, se conformó una Comisión por la Memoria, para realizar acciones conjuntas referidas al tema.


Consecuencia del Proceso
"Nosotros hemos sufrido bastante, porque la universidad tuvo sus mártires en la dictadura. Es un tema muy sensible para nosotros. Y creo que somos la universidad que más ha distinguido a aquellos luchadores por los derechos humanos, dándoles los doctorados Honoris Causa", expresó el rector de la UNR, Ricardo Suárez, días antes de que se cumplieran los 30 años del golpe.

Adolfo Pérez Esquivel en el 2002 y Estela de Carlotto por Abuelas de Plaza de Mayo y el juez español Baltazar Garzón en el 2003 son algunas de las personalidades a las que la universidad local les otorgó su máxima distinción en función de su trabajo por los derechos humanos.

Es que el caso de Ingeniería se reprodujo con similares consecuencias en las demás facultades, con el cierre de carreras (como en Antropología y Trabajo Social), el establecimiento de cupos para los ingresantes, el arancelamiento de los estudios y la "reestructuración" académica, con cesantías docentes y restricciones a la libertad de cátedra incluidos.

Otro de los pilares de la Reforma Universitaria del •18 como es el del cogobierno con participación estudiantil fue vulnerado de forma contundente. "No solamente está claro en la ley universitaria, sino en la mente de todos los docentes que realmente lo sean, que los estudiantes universitarios no pueden y no deben formar parte del gobierno universitario, ahora o nunca", señaló Riccomi, cuando era rector de la UNR, a fin de explicar de manera tajante las reglas de participación universitaria de entonces.

Una muestra más que justifica la necesidad de que el recuerdo del 30º aniversario del golpe encuentre a la comunidad universitaria con la mirada atenta a reflexionar y transmitir a las nuevas generaciones, y a muchos de las anteriores, el blanco perfecto para su plan de destrucción social que los promotores del golpe encontraron en la educación superior.
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