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 sábado, 11 de marzo de 2006  
Filmus quiere que los padres apoyen la tarea docente
Las maestras dicen que la función de enseñar es de ellos, la de los padres es motivar a sus hijos al estudio

Marcel Isaias / La Capital

"Que acompañen a los chicos a la escuela", "que apoyen a la cooperadora" y "que los motiven a estudiar". Estas son algunas de las sugerencias que las maestras les hacen a los padres. Es que a principio de esta semana, cuando el ministro de Educación Nacional, Daniel Filmus, inauguró el ciclo lectivo en la provincia de Buenos Aires, pidió a los padres "que apoyen la tarea docente" y los instó "a ayudar a sus hijos con la tarea en el hogar".

Al ser consultadas sobre cómo pueden colaborar los padres en su tarea, un grupo de docentes no dudó en decir que "la responsabilidad de enseñar es de la escuela" y que de ninguna manera es delegable esta función pedagógica. En cambio, si se trata de colaborar con esta tarea, cada una, desde su experiencia, aportó distintas ideas.

Beatriz García es vicedirectora del turno tarde de la Escuela Nº 660 de Rosario, una comunidad escolar más que numerosa: asisten a ella casi mil alumnos. Por eso entiende que el orden no es un hecho menor para garantizar el bienestar de los chicos. Beatriz cree que la mejor manera de colaborar es "llevándolos todos los días a clases, que los acompañen a la entrada y a la salida. Eso -agrega- contribuye a la asistencia, al cumplimiento del horario y a poner los límites necesarios para garantizar el aprendizaje de los chicos".

Pero también la vicedirectora de la escuela ubicada en zona oeste (Biedma al 6000) da algunas ideas para que los padres participen de las reuniones: "Muchas de nuestras maestras implementan salidas, paseos con los papás y las mamás, donde se los invita a merendar, tomar mate y conversar sobre la educación de los chicos. Algo que nos da muy buenos resultados".

"Los padres deben acompañarnos, pero siempre tiene que estar en claro que la tarea pedagógica es nuestra", dice al final de su comentario.

Con esta idea final de Beatriz coincide Liliana Acquaviva, docente de lengua y ciencias sociales en los 5º y 6º años de la EGB de la Escuela Familia de Dios. "Escuché una frase que me pareció muy buena que afirma que los padres no nos tienen que apoyar a nosotros sino que nosotras somos el apoyo de ellos". Según entiende Liliana, la tarea básica de educar es de la familia: "Yo le puedo dar un montón de contenidos y valores, pero lo fundamental lo trae el niño de su hogar".

Por eso considera que es clave que los padres ayuden en la formación de hábitos: "Muchos chicos no saben escuchar, comen parados, se sientan mal", cita como ejemplos.

Además indica que "no se trata de que los adultos les resuelvan las tareas a los chicos, sino que los acompañen mostrándoles interés por lo que hacen". Enseguida recuerda que es fácil de reconocer a aquellos chicos que reciben más atención en sus familias, desde cómo se presentan a la escuela (respecto de la higiene personal) hasta la respuestas que dan cuando se los convoca.


Contención y límites
Algo parecido piensa Betina Fabris, docente del nivel inicial de la Escuela Nº88 Juana Manso. "Muchas veces llamamos a los papás para indicarles algunas conductas que observamos, pero no siempre atienden a nuestras observaciones, es más creen que es sólo una idea nuestra", dice.

Para Betina se trata de que los padres apoyen los consejos que muchas veces les hacen de consultar a un profesional en particular, o bien de atender a algunas conductas que manifiestan problemas en los chicos.

Sin embargo, la docente de la Juana Manso advierte que el apoyo de los padres debe extenderse también a lo institucional. Recuerda así que "el pago de la cooperadora mucho contribuye al funcionamiento de la escuela pública, una cuota que tiene el mismo valor que un atado de cigarrillo".

A su vez, Laura Capara, profesora de lengua y literatura de una escuela privada del centro rosarino y apunto de asumir como vicedirectora titular en la Técnica Nº638, entiende que el mejor apoyo de los padres es "motivar a los chicos para que estudien y acompañarlos en la tarea". Sin embargo, Laura hace una aclaración que entiende es fundamental: "La tarea que se le dé a los alumnos deben resolverla solos, de lo contrario no los ayuda. Se trata que sean para profundizar los aprendizajes, no para complicarles la vida a los padres".

Pero como contrapartida, la profesora considera que es clave que los padres no deleguen en la escuela la tarea que les corresponde. "Muchas veces nos dicen que no saben qué hacer con sus hijos porque no les hacen caso, bueno no podemos asumir esa primera responsabilidad, la contención y los límites deben venir de la casa", advierte.

En general, la coincidencia pasa por señalar que los alumnos que más apoyo reciben del hogar, mejor rendimiento tienen en sus aprendizajes.

Filmus había recordado en su discurso que hay en el país más de 10 millones de alumnos que entran a las aulas, también que "no hay otra herramienta en la Argentina ni en el mundo que pueda convocar, al mismo tiempo, tanta gente para tratar de construir un futuro mejor. Ese es el milagro de la escuela y lo tenemos que defender".
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Consejo de maestra: más acompañamiento, mejores aprendizajes.

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