Después del triunfo. El ganador de los comicios porteños insiste en que Muniagurria es su referente provincial

Macri busca hacer pie en Santa Fe y le tira un anzuelo a Reutemann

Atribuyó la mala performance en la provincia a la ausencia de propuestas constructivas. Críticas a Kirchner

Se perfila como uno de los referentes más nítidos de la oposición al gobierno nacional desde la franja de la centroderecha. Junto a Cristina Fernández y Néstor Kirchner en todo el territorio nacional y a dirigentes como Hermes Binner en Santa Fe, Maurcio Macri se cuenta entre los ganadores del 23 de octubre.

Con una particularidad: cuando el discurso político y el voto de los argentinos parecen entrar en un ciclo recostado hacia la centroizquierda, Macri abrió una brecha opositora más ligada a las tradiciones liberales y conservadoras del país. Ganó en la siempre emblemática Capital Federal y ahora sueña con establecerse en todo el territorio nacional.

El presidente de Boca eludió referirse a la tensa situación creada por la deserción de una figura clave de la campaña electoral de Propuesta Republicana (PRO) en la Capital Federal, el candidato electo Eduardo Lorenzo Borocotó. Respecto al tema se escuda de seguir opinando y hace un gesto elocuente. El ingeniero ya dijo todo lo que tenía que decir.

Respecto de Santa Fe, anunció que su referente será Marcelo Muniagurria. Según Macri, la pobre performance electoral de su nuevo partido en Santa Fe, el 23 de octubre, "se debió a que no tuvimos una propuesta constructiva, una propuesta pro, que es nuestra sello característico".

Por lo demás, y hablando de la provincia, Macri no dudó en referirse a Carlos Reutemann como a un amigo. "Tengo un enorme afecto por él, y no descarto en algún momento compartir un espacio político común", dejó planteado. Con 603 mil votos cosechados el 23 de octubre (34% en Capital Federal) obtuvo un triunfo claro en el segundo distrito electoral del país. "Esto tiene una obligación adicional: convertirnos en la verdadera alternativa democrática al sistema. Un rol fundamental para evitar el peligro de la concentración en un único polo de poder. Somos necesarios para el equilibrio institucional", dando por hecho que se siente un jugador importante en el tablero político nacional.

De quien fuera funcionario reutemista y ahora referente del PRO santafesino, Marcelo Muniagurria, Macri confirmó que "se ha sumado al partido nuestro para construir una alternativa diferente". Y agregó que aspira a que Santa Fe "consolide la línea que armamos a nivel nacional como alternativa de un sistema democrático que está desequilibrado y débil".

"Reutemann es un amigo, tengo un enorme afecto personal por él. En este momento está ubicado políticamente en el justicialismo pero no voy a descartar la idea de que en algún momento nos podamos juntar en un espacio político común. No lo descarto, eso nunca se sabe", agregó Macri en exclusiva con este diario, sugiriendo cierto enigma en el futuro político del Lole.

Respecto de la performance de PRO en las elecciones de octubre en Santa Fe, Macri reconoció que su partido "no tuvo una propuesta alternativa y constructiva", lo que habría motivado una cosecha de votos casi marginal (unos 25 mil votos, que representaron el 1,7%).

Por lo demás, Macri definió que el futuro de la construcción política de su partido tendrá el acento en los proyectos, en las soluciones a los problemas que tiene la gente, antes que en definiciones ideológicas. En ese sentido rechaza la idea de que el "país político" (como plantean algunos analistas) se "configure con dos grandes espacios de coaliciones". Uno a la centroizquierda y otro hacia la centroderecha. "Esa es una definición del siglo pasado", disparó con dureza.

El diputado electo tampoco se manifestó conforme con los resultados de la Cumbre de la Américas, que se concretó en Mar del Plata. El ex empresario automotriz consideró que otra vez la Argentina "perdió una oportunidad". Para él fue "lamentable que diéramos al mundo las imágenes de violencia que se sucedieron en la zona de la avenida Colón". Por lo demás, de haber estado en sus manos el rol de presidente de la Nación, "nunca" se "hubiera peleado con México".

La visión de Macri sobre el conflictivo tema Alca (tratado de libre comercio que impulsa Estados Unidos y rechazan los países del Mercosur y Venezuela) es positiva. Y en eso marca una clara diferencia con el gobierno nacional. Aunque sostiene: "Faltaría resolver la cuestión de los subsidios agrícolas", en referencia a las políticas proteccionistas que muchos países del norte desarrollado aplican en defensa de sus productores.


De Ushuaia a La Quiaca
Macri confía en alcanzar un rápido armado nacional e importante de su agrupación PRO. Por ahora profesa simpatía mutua con (Jorge) Sobisch, el gobernador neuquino, suma el aporte de López Murphy (aunque desgastado después de las elecciones) y coordina a distintos referentes en otras provincias.

"Muchos intendentes se sumarán a nuestra propuesta. Lo nuestro es la gestión, y los que todos los días llevan a cabo la dura tarea de gobernar son los que más se identifican con nuestra propuesta", dijo, proyectando el futuro.

Los sábados, Macri despunta el vicio jugando al fútbol en un country.