Año CXXXVIII Nº 48910
La Ciudad
Política
Información Gral
Opinión
El Mundo
La Región
Policiales
Cartas de lectores



suplementos
Ovación
Escenario
Señales
Turismo
Mujer
Economía


suplementos
ediciones anteriores
Educación 22/10
La otra mirada 22/10
Salud 19/10
Turismo 16/10
Mujer 16/10
Economía 16/10
Señales 16/10

contacto

servicios
Institucional


 domingo, 23 de octubre de 2005  
No habrá otro igual
El Flaco Traverso recorrió su vida como piloto

Gustavo Conti / Ovación

Tenía (tiene) chapa para hablar. Fue siempre, inevitablemente, el centro de atención. Se hizo a sí mismo, rompiendo reglas, estando por encima de ellas. Amado y odiado. Impulsivo, racional, calentón, genial. Todo eso fue Juan María Traverso, además de un piloto inigualable, 16 veces campeón, circunstancia que también lo hizo carismático no sólo de la boca para afuera. Idolo, hasta para que le perdonen pasar de Ford a Chevrolet y coronarse con ambas marcas que están en las antípodas de los fanáticos tuercas del Turismo Carretera.

Fue (es) el último verdaderamente grande del automovilismo argentino, de esos que entran en la categoría de irrepetibles y que al colgar el casco entrará a ser leyenda, viva por cierto. No quedan pilotos así, amén de Marquitos Di Palma, que convoca más por lo que es afuera que adentro del auto. Y a dos meses de su retiro definitivo, a dos meses de cumplir 55 años, el Flaco de Ramallo no se retracta de la decisión que tomó el 8 de agosto en Olavarría, el mismo circuito donde ganó su última carrera.

¿Y en qué anda Traverso? Viajando como representante de la Petrolera Elf llegó a Rosario para disertar en la distribuidora Vetaro S. C. Ahora, además, se ocupa de los pilotos, aún aquellos que lo defenestraban, llenando el hueco de 35 años piloteando... "Por un lado estoy ocupado haciendo cosas y por el otro agregándome otras para no pensar demasiado. Seguí yendo a las carreras y me sentí bien. La decisión que tomé fue la correcta porque hoy puedo seguir diciendo que no tengo más ganas de correr, más allá de que me gusta siempre ir al autódromo, meterme donde no me tengo que meter, discutir... Eso es igual, nada más que abajo del auto", dijo el Flaco en un mano a mano con Ovacion.

-Suena raro que digas: "No tengo más ganas de correr".

-Creo que pasa como con todas las cosas. Cuando no podés hacerlas como vos considerás que las tenés que hacer, a partir de ahí no tenés más ganas de seguir intentando. Fue lo que me pasó. Sabía que me estaba equivocando más de la cuenta, producto de no dedicarle el tiempo necesario. Me equivocaba a veces en la puesta a punto porque no hacía todas las pruebas que debía hacer y todo eso llevó al final.

-O sea, hubo un clik para tomar la decisión, pero tuvo su causa.

-Claro, la causa es eso que no ves o no querés ver. Y cuando lo vi, de golpe, dije: "Hasta acá llegué y si sigo va a ser peor".

-¿Lo sentiste realmente al momento de calzarte el buzo antiflama para salir a la pista en Olavarría?

-Sí, fue así. Llegué el domingo como siempre, me puse a tomar mate con (Miguel Angel) Etchegaray y cuando me llamaron para la primera serie, en ese preciso momento me dije: "No voy, no tengo más ganas". Fue así de simple.

-¿No te quitó motivación que te desclasificaran en tu triunfo de La Plata, en marzo último, donde inclusive quedabas como líder del campeonato?

-No, esas cosas pasaron siempre, no era algo nuevo para mí en el automovilismo. No me planteé si era justo o injusto, y siempre en el momento te calentás. Pero no influyó eso ni tampoco las actitudes del grupo de corredores que permanentemente criticaban y daban vuelta sobre lo mismo. Eso me divertía, entre comillas, hasta algo de cómico había en todo eso. Lo que verdaderamente me cansó fue estar arriba del auto. Lo de abajo no me gustó y me cansó toda la vida, pero nunca me había pasado de estarlo mientras manejaba.

-¿Te cansaste mentalmente y también físicamente?

-No, físicamente estoy bien. De hecho, hasta el último día estaba peleando con los de adelante. Inclusive, el comentario general era cómo hacía para bajarme así del auto, hasta mejor que los pibes. Eso era porque el físico me aguantaba y por el oficio también, así que ese no fue motivo.

-¿Cuántos te pidieron en estos dos meses que volvieras a correr?

-Uff, muchísimos. Me paran por la calle, me mandan mensajes y hay gente que se puso realmente muy mal. Pero en general nadie tuvo malas actitudes, ni siquiera los "contras", que actuaron realmente bien conmigo.

-¿Realmente no le das alguna esperanza a tus fans de volver a correr?

-No, en serio. Y menos cómo es hoy el automovilismo. Hace dos meses que no subo a un auto y si mañana quisiera correr sería 8 décimas más lento. Acá sí corre eso de que si te bajaste, perdés el tren.

-¿Traverso piloto, entonces no va más?

-No, no va más.
enviar nota por e-mail
contacto
Búsqueda avanzada Archivo

Ampliar FotoFotos
Ampliar Foto
El piloto de Ramallo estuvo a punto de correr en la máxima categoría.

Notas Relacionadas
Quiere ser la voz de los pilotos

"Sin Traverso se les terminó el show"

"Hubiera corrido en la F-1"



  La Capital Copyright 2003 | Todos los derechos reservados