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 domingo, 23 de octubre de 2005  
Lavagna retomará las negociaciones con el FMI después de las elecciones

Buenos Aires.- El ministro de Economía, Roberto Lavagna, reiniciará tras las elecciones legislativas de este domingo, los sondeos para reanudar el diálogo con el Fondo Monetario Internacional (FMI), en una negociación que enfrenta ribetes complicados por las posiciones enfrentadas que exhiben ambas partes.

El Fondo sostiene que no habrá acuerdo si no se le brinda antes una solución a los acreedores que no aceptaron el canje, los denominados "holdouts", que poseen 23.000 millones de dólares en títulos que hoy no cotizan en el mercado.

Al mismo tiempo, Lavagna insiste en que ese eventual acuerdo con esos acreedores dependerá de la refinanciación general de los vencimientos con el Fondo y el resto de los organismos internacionales de crédito.

Para dejar en claro los términos, Lavagna sostiene que "el proceso de reestructuración de la deuda ya terminó".

Incluso el principal negociador de la deuda, el secretario de Finanzas, Guillermo Nielsen, precisó en reiteradas oportunidades que "no estamos estudiando nada para los bonistas que no entraron al canje".

Pero la posición del Fondo no es un capricho. Parte de sus estatutos redactados hace 10 años, señalan la imposibilidad de lograr acuerdos con naciones que están en mora con sus acreedores.

Tal vez por eso la semana pasada el secretario Nielsen tendió un "puente de plata" para el titular del Fondo, Rodrigo Rato, al asegurar que el funcionario "era el futuro y no el pasado" del organismo.

Sin embargo, el propio Rato, pareció volver a enarbolar la bandera de la ortodoxia al rechazar las críticas que le viene formulando al organismo el Gobierno argentino, y relativizar el hecho de que los políticas avaladas por el FMI en los 90, hayan sido la única causa de la crisis de la Convertibilidad.

"Es difícil de creer que se pueda llegar a una catástrofe económica de ese calibre sólo por las recomendaciones de un organismo multilateral", sostuvo Rato en una entrevista concedida a la cadena española Euronews.

Y acto seguido, consideró que uno de los elementos que contribuyeron a mermar la confianza de los ciudadanos es la incapacidad de los "gobernantes para transmitir un mensaje nítido y claro sobre sus políticas de futuro".

En Economía insisten en que estas declaraciones "son parte de las negociaciones que vienen" e insisten que el tema de los acreedores que no entraron al canje "es sólo uno de los temas a tratar".

La propuesta de Argentina es llegar a un acuerdo que le permita refinanciar los pagos y no tomar nuevos créditos "porque este es un proceso de reducción de deuda", señala una y otra vez el propio Lavagna.

E insiste en que se logrará un nuevo acuerdo ya que, en situaciones anteriores, también se acordó con el rígido Fondo un plan no del todo ortodoxo, como el alcanzado en el 2002 y que se extendió por el término de un año, como para permitir el desarrollo de las elecciones presidenciales que llevaron a Néstor Kirchner a la Casa de Gobierno. (Télam)


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