El policía atrincherado depuso su actitud y fue detenido

El cabo de la policía Sergio Falaschetti, quien desde ayer a la madrugada se encontraba atrincherado en el destacamento del Hospital Provincial, depuso en las primeras horas de hoy su actitud luego de dialogar con el subsecretario de Seguridad de la provincia, Gustavo Peters, y quedó detenido en la comisaría 1ª.

Falaschetti, un policía que en mayo último había denunciado por robo de combustibles a superiores suyos de la Unidad Regional II, se atrincheró ayer y amenazó con suicidarse si el gobierno provincial no revertía la cesantía de dos compañeros que se había encadenado a la sede de la Jefatura.

El policía -quien también en junio había denunciado que pretendieron electrocutarlo en la seccional 30, donde prestaba funciones- rechazó de plano una audiencia con la jefa de POlicía provincial, Leyla Perazzo, de quien dijo que había traicionado a la fuerza porque en su momento prometió que no habría sanciones contra los policías que se había acuartelado y no cumplió.

"Me voy a aquedar acá hasta que el gobernador (Jorge Obeid) dialoguen con m is compañeros que están encadenados y que van a aperder el trabajo". Falascheti se refería a los hermanos Roque y Eber Palermo. Este último se presentó en el hospital para solidarizarse con su compañero.

Luego de arduos diáologos, donde incluso participó un negociador de las TOE -quien fue quien le acercó al policía la oferta de dialogar con la doctora Perazzo- alrededor de la 0.40 de hoy Falascheti depuso su actitud y entregó el arma reglamentaria luego de dialogar con el subsecretario de Seguridad de la Provincia, Gustavo Peters.

El policía fue detenido y trasladado a la comisaría 1ª quedando a disposición de la jueza de instrucción Raquel Cosgaya, quien está mañana le tomará declaración indagatoria.

Detrás de esa puerta, en una pequeña sala, estuvo atrincherado Falaschetti hasta las primeras horas de hoy.