Agentes de la Guardia Urbana amenazan con un paro

El descontento se origina en el reparto de adicionales y horas extras. Esta semana enviaron un petitorio al intendente

Los inspectores de la Guardia Urbana Municipal (GUM) entregaron esta semana un petitorio con diversos reclamos al intendente Miguel Lifschitz y amenazaron con que, de no encontrar respuesta a sus pedidos, realizarán una medida de fuerza el próximo 21 de septiembre, medida que intentará aguar el operativo de seguridad que el municipio lanzó para el Día de la Primavera. Uno de los puntos que más irrita por estos tiempos a los agentes de la GUM es la "forma arbitraria" en la que se estarían repartiendo adicionales, horas extras y recorridos a los inspectores.

Así lo denunció a La Capital un grupo de inspectores que prefirieron mantener sus nombres en reserva. El malestar ya se habría manifestado en varias asambleas realizadas en el galpón de la GUM del Parque Nacional a la Bandera. En la última -que se desarrolló anteanoche- "el 80 por ciento" de los guardias habrían acordado que de no ser escuchados sus reclamos realizarían una medida de fuerza el próximo miércoles.


Repartos "a dedo"
"Estamos cansados de que los cargos, los adicionales y las horas extras se repartan a dedo", sostuvieron los agentes, a la par que denunciaron que "muchos compañeros son sancionados injustamente y separados de su función sin que medie ningún sumario".

Según indicaron los agentes, "a los empleados que han denunciado esta situación se los ha discriminado" al otorgarles los recorridos y sectores más conflictivos y privarlos de uso de vehículos.

"Al que se queja lo mandan a caminar la peatonal o a controlar a los vendedores ambulantes", señalaron, y advirtieron que "mientras tanto, quienes ocupan cargos de jefe juegan al fútbol en el horario de trabajo".

El secretario general del Sindicato de Municipales, Néstor Ferrazza, confirmó que "hace tiempo que un grupo de agentes de la GUM viene pidiendo mejoras", pero desestimó la posibilidad de que se realice por ahora alguna medida de fuerza. "El martes tendremos una asamblea y veremos qué pasa", indicó.

El gremialista indicó también que el conflicto se desató por "el retraso en el pago de adicionales y horas extras" y el mal estado del edificio donde está trabajando el cuerpo de inspectores.