Año CXXXVIII Nº 48768
La Ciudad
Política
Economía
Información Gral
Opinión
El Mundo
La Región
Policiales
Ovación
Cartas de lectores



suplementos
Escenario
Educación


suplementos
ediciones anteriores
Turismo 29/05
Mujer 29/05
Economía 29/05
Señales 29/05
Educación 28/05
Salud 25/05
Autos 25/05

contacto

servicios
Institucional

 sábado, 04 de junio de 2005  
Niegan psicosis en la chica jujeña que mató a su beba
Tres peritos oficiales coincidieron en el juicio a Romina Tejerina, que se realiza en San Salvador

Tres peritos psiquiátricos oficiales desacreditaron ayer la hipótesis de que Romina Tejerina, la joven jujeña que mató a su beba concebida tras una supuesta violación, cometió el crimen bajo un estado psicótico agudo.

En la segunda audiencia del juicio oral en San Salvador de Jujuy, los peritos forenses coincidieron en señalar, no obstante, que la chica tuvo una infancia en la que padeció violencia física y psicológica.

La perito de parte María Teresa López de Fernández ratificó en cambio que el asesinato se produjo en medio de un "episodio psicótico agudo". El estado emocional de Tejerina en el momento del homicidio era "violento", lo que le impidió estar en su "sano juicio", aseguró la psiquiatra aportada por la defensa.

Pero Mabel Sánchez, psiquiatra forense que trabajó en equipo con la médica psiquiátrica Teresa Hormigo y el médico cirujano con post grado en psiquiatría forense César Burgos, llegaron a la conclusión contraria.

Sánchez dijo que en el estudio que le efectuó a la imputada "no se determinaron alteraciones morbosas ni estado de inconciencia" cuando apuñaló a su beba al nacer, aunque destacó que sí detectó "rasgos histriónicos de personalidad".

Cuando el presidente del tribunal le preguntó a Sánchez si notó que la acusada padecía angustias o había sufrido episodios dolorosos, la médica respondió que "hubo una historia de violencia familiar que tiene relación con su vida social".

Para la psiquiatra Hormigo, quien también estudió a la paciente, "no había alteraciones" psicológicas en Tejerina y su memoria "no estaba alterada".

Hormigo coincidió con Sánchez en que la acusada tuvo una "historia de vida conflictiva, de violencia familiar, castigos corporales, violencia psicológica", hasta que cambió de domicilio un año antes del homicidio.

El médico Burgos coincidió con sus colegas en la hipótesis de que no hubo un brote psicótico, y precisó que la beba tenía entre 34 y 35 semanas de gestación en el momento del parto.

El último en comparecer ante el tribunal fue el médico policial de San Pedro, quien realizó la autopsia de la bebé unos cinco días después de su muerte y dijo no recordar el número de heridas penetrantes y cortantes. Según la acusada fueron dos, pero en el expediente se consigna que hubo alrededor de 20.

La perito de parte Fernández, quien tuvo su primera entrevista psicológica con Romina el 13 de noviembre de 2003, nueve meses después del crimen, señaló que la joven "no tuvo acompañamiento ni contención" de sus padres y maestros y que vivió el embarazo "en soledad y ocultamiento". Tejerina es juzgada desde el miércoles en Jujuy por homicidio agravado por el vínculo por el que puede corresponderle cadena perpetua.

La chica aseguró haber sido violada a la salida de un baile en 2002 por un vecino al que identificó como Eduardo Vargas, quien sin embargo fue sobreseído.

Después de ocultar su embarazo, la acusada dio a luz en el baño de su casa el 23 de febrero del 2003, cuando mató a la beba a cuchilladas tras introducirla en una caja de cartón. La fiscal solicitó que se citara como testigos a Javier González, supuesto novio de Romina en aquel momento, y al supuesto violador, pero el tribunal no hizo lugar al pedido (Télam)
enviar nota por e-mail
contacto
Búsqueda avanzada Archivo


Ampliar FotoFotos
Ampliar Foto
Romina (izquierda) observa a su madre.


  La Capital Copyright 2003 | Todos los derechos reservados