Votan en la Caja donde faltaron 627 mil dólares

Mientras sigue sin resolverse qué pasó con unos 627 mil dólares que desaparecieron de dos cofres de seguridad que la entidad poseía en el Banco Municipal de Rosario, los afiliados a la Caja de Ingenieros irán mañana a las urnas para elegir sus nuevas autoridades.

Se presentan dos listas: Reconstrucción, enfrentada con la actual conducción e integrada por el ingeniero civil Alejandro Laraia y la arquitecta Graciela Garate, y patrocinada por el arquitecto Hernán Angiolini; y Frente interdisciplinario, emparentada con el actual directorio de la Caja e integrada por el ingeniero civil Ernesto Bianchi y el ingeniero electricista Alberto Daher, y patrocinada por el arquitecto David Solomonoff.

La conducción que surja de estos comicios, además de continuar con las prestaciones jubilatorias y asistenciales, tendrá como compromiso esclarecer la desaparición de fondos descubierta en diciembre del año pasado.

El misterioso faltante quedó al descubierto luego del suicidio del presidente de la Caja, Alberto Traverso, quien resultó el principal sospechoso, por lo que la Justicia podría llegar a pasar al archivo el caso. Es que le adjudican al ex presidente un manejo autoritario de los destinos de la Caja por casi ocho años, y la investigación determinó que todas las entradas al subsuelo del Banco Municipal -donde se encuentran los cofres de seguridad- habían sido realizadas por el propio Traverso, quien tenía las llaves a su exclusiva custodia.

Uno de los interrogantes del caso es cómo logró que el secretario de la entidad le firmara su consentimiento para este manejo irregular de fondos, aunque tampoco eso pudo ser esclarecido ya que el ingeniero Juan Cignoli -de él se trata- falleció en marzo de este año.

El resto del directorio de la Caja tampoco puede dar respuestas. El presidente que reemplazó a Traverso (ingeniero Amatriain) pidió licencia hasta el fin de su mandato; otro de los directores (arquitecto Pasquali) renunció por diferencias con el resto del directorio; uno de los suplentes (ingeniero Ninfi) no puede asumir por cuestiones particulares. Así, la Caja ha quedado al borde de la intervención provincial por falta de quórum en su dirección.