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 miércoles, 30 de marzo de 2005  
Piden la cobertura total para el tratamiento de la epilepsia
Una ley aprobada por Diputados obliga a las obras sociales a solventar los costos de la medicación

Grupos de pacientes y familiares de epilépticos encontraron eco en la diputada nacional Alicia Tate (Unión Cívica Radical), quien presentó un proyecto que obliga a las obras sociales a cubrir el ciento por ciento de los medicamentos necesarios para determinar la eficacia del tratamiento. La ley actual N 25.404, vigente desde 2001, asegura a los pacientes sin cobertura médico asistencial y carentes de recursos económicos la provisión gratuita de la medicación pero no incluye a quienes cuentan con obra social. El proyecto de referencia representa un gran avance ya que establece duras penas para quienes no cumplan con la norma. Actualmente son pocas las prepagas que cubren los tratamientos farmacológicos.

La propuesta de modificación de la ley establece que "las obras sociales y asociaciones de obras sociales del sistema nacional comprendidas en la ley 23.660 deberán incorporar como prestación obligatoria la cobertura del ciento por ciento de los tratamientos farmacológicos de las personas que padecen de epilepsia y las pruebas de laboratorio necesarias para determinar la eficacia del tratamiento. Contarán con el mismo beneficio las personas que no posean la cobertura médico asistencial". Las sanciones van desde el apercibimiento hasta multas considerables.


Tres de cada cien
Según la Organización Mundial de la Salud la epilepsia es la patología neurológica más frecuente en el mundo que afecta en promedio a 70 de cada 100 mil personas, sin discriminación de edad, sexo o límites geográficos. Se presenta con un conjunto de síntomas cuya aparición ocupa largamente la historia de la humanidad. En Argentina lo padecen de una a tres personas de cada 100, según datos de 1991. Los costos de los tratamientos farmacológicos constituyen un impedimento para una porción importante de la población.

"La epilepsia es una enfermedad que no está limitada a determinadas poblaciones. Su incidencia es muy antigua y no ha variado a lo largo del tiempo, excepto por el aumento de la accidentología, ya que en ocasiones los traumatismos encéfalo-craneanos la pueden causar", puntualizó el doctor José Luis Dillon, jefe del servicio de Neurología del Hospital Alejandro Korn, de La Plata. "Y aunque puede manifestarse en cualquier momento de la vida -agrega-, la niñez-adolescencia y la tercera edad, son etapas donde se presenta con mayor frecuencia".


Origen y manifestaciones
La epilepsia puede tener diversas causas e, incluso, ser el síntoma clínico de otros problemas orgánicos. Las lesiones cerebrales, los traumatismos, las malformaciones congénitas, las anomalías metabólicas, los tumores y las secuelas de algunas enfermedades o infecciones -como la meningitis- pueden originar este desorden neurológico. En otras personas, estas descargas eléctricas excesivas y repentinas (crisis) de las células cerebrales no tienen una causa identificable. A este tipo de epilepsia se la conoce como idiopática, y tendría algún componente genético en su origen.

"En estos casos hay una historia frecuentemente familiar. Muchos estudios demuestran que, estadísticamente, existe cierta predisposición a que algunos miembros de la misma familia puedan tener este desorden", explica Dillon.

La característica clínica más importante de la epilepsia es la variabilidad y heterogeneidad de sus manifestaciones, que dependen del lugar donde se focalice la descarga y de la causa que promueva estos ataques. Las crisis pueden ser focales o generalizadas. Cuando la descarga es generalizada se manifiesta con la pérdida del conocimiento, seguido de contracciones musculares (convulsión) y, posteriormente, un estado de relajación y sueño que puede durar unos minutos. Cuando la descarga es más localizada, las crisis son parciales o focales y pueden manifestarse con la contracción, por ejemplo, de un brazo y una pierna, el parpadeo rápido, o con alteraciones de la percepción, entre otras.

Aunque se suele relacionar la epilepsia con las convulsiones generalizadas en las que la persona se desploma, pierde el conocimiento y sufre la contracción involuntaria de los músculos, no todos los ataques tienen este tipo de manifestación, ni todas las convulsiones son producto de la enfermedad.

"Las ausencias son otro tipo de crisis en las cuales se produce una interrupción brusca de la conciencia que puede ser muy fugaz, casi imperceptible, o durar el tiempo suficiente como para que alguna persona pueda notarlo" indica Dillon. Este es un tipo de epilepsia que predomina en la infancia. Por ejemplo, si el niño está escribiendo, se produce una interrupción de su actividad consciente y cesa un instante la escritura.

El éxito del tratamiento no depende sólo de la eficacia de los medicamentos sino del compromiso del paciente para el cumplimiento de la terapia. El 70% controla las crisis con medicación anticonvulsivante.


Enfermedad controlada
El desarrollo de nuevas drogas ha ampliado el espectro farmacológico para el tratamiento médico. Al respecto, el jefe de la sección de epilepsia del centro neurológico del Hospital Francés de Buenos Aires, Alfredo Thomson, dijo que "el 64% de los pacientes controla bien sus crisis con una sola droga".

Los principales tratamientos disponibles se basan en medicamentos antiepilépticos y anticonvulsivantes, orientados a prevenir la aparición de las crisis y brindarle al paciente una especie de "escudo" para que, en el eventual caso de que aparezca la descarga, esté protegido y no se produzca la convulsión.

"Hoy existen medicamentos modernos que son muy efectivos y prácticamente no producen efectos indeseables. La mayoría se beneficia con el tratamiento y puede controlar la enfermedad, siempre que cumpla con las indicaciones y los chequeos correspondientes", advierte el especialista.

En aquellos casos en los que las crisis no son controladas eficientemente con los fármacos y se transforman en un problema por su naturaleza o repetición, existe la alternativa de una cirugía para erradicar el lugar de la descarga. "Aunque -aclara el neurólogo- no todos los pacientes son aptos y se trata de tratamientos extremos".
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Personas con epilepsia formaron una asociación para brindar ayuda e información a pacientes.

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Unica asociación de pacientes


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